La película obtuvo multitud de premios y nominaciones en festivales internacionales, como siete premios en el Festival de Venecia en 1993, el Premio Especial del Jurado en el Festival de Chicago en 1993, tres premios César en 1994 y el Goya a Mejor Película Europea en 1994.
Esta película es la primera de la trilogía Tres colores, centrada en los ideales revolucionarios franceses de "Libertad, igualdad, fraternidad" asociados a los colores de la bandera francesa. El tema de Tres colores: Azul es la libertad, mientras que en sus sucesoras -Tres colores: Blanco y Tres colores: Rojo-
son la igualdad y la fraternidad respectivamente.
El director hizo a su asistente probar distintas marcas de terrones de azúcar para que encontrase una que se disolviese exactamente en cinco segundos, pues era lo que quería para una escena concreta.