La serie revive el famoso caso de Lizzie Borden, acusada de asesinar a su padre y madrastra en 1892. Entre secretos y sospechas, plantea una inquietante duda: ¿quién fue la víctima y quién el verdadero monstruo?
La serie sigue al exdetective Harry Bosch, ahora detective privado, mientras busca al heredero de un multimillonario y ayuda a capturar a un violador en serie.