El miércoles 12 de noviembre RTVE estrenó una de sus grandes apuestas de la temporada televisiva. Hasta el fin del mundo, presentado por Paula Vázquez, aterrizó en el 'prime time' de La 1 para mostrar la aventura de seis parejas de famosos en llegar al destino final que desconocen. Un desafío por el que estuvieron durante más de dos meses viajando por América Latina.
Pese a las quejas por el horario, la primera entrega de Hasta el fin del mundo hizo disfrutar a la audiencia más aventurera. Sin embargo, en los últimos días, dos concursantes han cargado contra la edición del programa ya que consideran que "no representa" el trayecto que han realizado durante estos meses.
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La primera en alzar la voz fue Alba Carrillo, quien está acompañada por la expolítica Cristina Cifuentes. "No estoy de acuerdo con la edición, no representa el viaje que he hecho", afirma en un vídeo compartido en las redes sociales. La colaboradora de televisión siente que el programa ha transmitido que ella y su compañero no han trabajado lo suficiente, algo en lo que no está de acuerdo.
"Ha sido un viaje maravilloso, han pasado cosas de todo tipo y creo que la edición no representa lo que hemos trabajado Cristina y yo", reconoce Carrillo, destacando que el paso por el spa era obligatorio. "Dar una imagen de que nosotras nos hemos ido a un spa en vez de ir a nuestro trabajo, cuando hemos sido unas luchadoras, unas currantas y hemos estado sin dormir, sin comer, sin desayunar a trabajar, pues la verdad es que a mí personalmente me duele", reconoce.
La modelo vuelve a señalar que no se sentido "representada" por que la edición del programa "se ha centrado muchísimo en los conflictos" entre ella y su compañera. "Puedes sacar los conflictos, pero hay muchísimas cosas que Alba y Cristina, como pareja, han dado. Han trabajado, han luchado, se han reído, han hecho tándem sin conocerse y me duele que se centren en las disputas", destaca la concursante, a la vez que afirma que el día de la emisión se puso "malísima"
Aldo Comas se defiende de las críticas de los espectadores
Aldo Comas fue uno de los protagonistas absolutos de la noche. La audiencia cargó contra la extravagante personalidad del marido de Macarena Gómez, quien fue impulsivo y un tanto vehemente. Siguiendo la misma línea que Alba Carrillo, el compañero de José Lamuño se ha defendido poniendo el foco en la edición.
"Hay muchas cosas que no se ven en ese viaje. Me da muchísima pena porque falta muchísimo, es como que solo se ve un 2%", explicó el domingo en D Corazón. "Si me ves acabar las frases o tienes un momento de pausa conmigo, me puedes llegar a entender. Esto se corrobora si estás un rato más conmigo. En el programa, estoy todo el rato como muy arriba y parece como que paso de todo", lamentó el concursante.
Aldo asegura que él y su compañero tuvieron "dos rifirrafes por dos chorradas que se han sobredimensionado". "Parece que hemos empezado con mal pie, pero es absolutamente mentira. Llegamos superfelices, pero no se han visto esas imágenes", aseguró y afirmó que le sorprendieron las críticas de la audiencia.
"Estoy acostumbrado a lo que sea. Me importa muy poco que haya hate porque quiero saltar en paracaídas y pierdo la dinámica del programa. En este programa, yo vine a mostrar cómo yo viajaría y jamás voy a viajar compitiendo, por mucho que sea un concurso. Esas eran mis premisas con José [Lamuño] y era el pacto que teníamos. Queríamos pasárnoslo bomba y disfrutar de cada esquina", sentenció.