Papeles como Aquellos maravillosos 70, Colega, ¿dónde está mi coche? o Dos hombres y medio a menudo nos hacen asociarle de forma inevitable a la comedia, de modo que quizá te sorprenda saber que precisamente Ashton Kutcher tiene una escalofriante conexión con un asesino en serie que dejo varias víctimas en la primera década de los 2000. Al ya convicto asesino, Michael Gargiulo, se le conoce como el "Destripador de Hollywood" y, antes de ser detenido, asesinó a dos mujeres e intentó asesinar a una tercera. Una de ellas, Ashley Ellerin, había quedado para tener una cita con Ashton Kutcher la noche que fue asesinada.
Según contaría Ashton Kutcher tanto en el juicio contra el asesino como en declaraciones previas a las autoridades, el mismo día que Ashley Ellerin fue asesinada el 22 de febrero de 2001 ambos habían concertado una cita. Ella era estudiante de diseño de moda, mientras que Kutcher triunfaba en aquel momento con su inolvidable comedia Aquellos maravillosos 70. Ambos tenían 22 años. Pero, cuando acudió a recogerla a su casa de Hollywood dos horas después de haber quedado por teléfono, Ellerin no abrió la puerta.
Según Kutcher, cuando llegó al apartamento encontró las luces encendidas y la puerta cerrada y que asomándose por la ventana vio "lo que pensé que era vino tinto derramado sobre la alfombra". "Realmente no pensé nada al respecto", aseguró sobre aquella imagen explicando que, segñun recogió City News, sencillamente había dado por hecho que la "había cagado" por llegar tarde y que asumió que Ellerin se habría salido.
ABC News
Ellerin, fue encontrada muerta en su domicilio a la mañana siguiente por su compañera de piso. La joven había recibido 47 puñaladas, según la información ofrecida por la Fiscalía, en el que fue el primer crimen de los dos por los que se juzgaría a Michael Gargiulo, quien también fue sospechoso y posteriormente acusado de haber asesinado a puñaladas a su vecina en otro Estado en los 90 sin que haya podido ser juzgado aún por aquel asesinato. A Gargiulo también se le juzgó por el asesinato, de nuevo apuñaladas, de su vecina en California en 2005 y por el intento de asesinato en 2008 de otra de sus vecinas que logró zafarse del ataque. Este último caso es el que permitiría relacionarle con los crímenes mediante el ADN y ser procesado por ello. Él se declaró inocente de ambos crímenes y se cree que dejó más víctimas, pero no ha podido relacionársele con otros crímenes.
Según contó Kutcher en la primera parte del juicio celebrada en 2019, cuando el actor se enteró al día siguiente de que Ellerin había sido asesinada rápidamente habló con la policía: sabía que sus huellas dactilares estarían en la puerta de la casa de la víctima.
Recuerdo que al día siguiente después de enterarme de lo que pasó, fui a los detectives y les dije: 'Mis huellas dactilares están en la puerta'", testificó Kutcher. "Me estaba volviendo loco
El testimonio de Kutcher brindó una gran notoriedad al caso, pero también fue usado para establecer las líneas temporales del asesinato de Ellerin y que, a pesar de que el abogado defensor de Gargiulo llegó a usarlas para demostrar que podría haber sido su cliente, el acusado finalmente fuese sentenciado culpable del crimen. De hecho, el fiscal llegó a poner en las anotaciones finales que el asesinato podría haber estado relacionado con celos hacia Kutcher y haberse desencadenado tras la llamada.
En 2021 Michael Gargiulo fue condenado a pena de muerte por los dos asesinatos que pudieron serle imputados.
