
Guillaume se adentró en el mundo del cine desde muy pequeño gracias a su padre y a su madre, la actriz Elisabeth Depardieu. Pero no debutó en la interpretación hasta 1991, con la película 'Todas las mañanas del mundo', dirigida por Alain Corneau.
Su carrera se vio reconocida en 1995, cuando el joven actor fue galardonado con el César por su papel en la película de Pierre Salvadori, 'Los aprendices'.
En 2003, Guillaume sufrió un grave accidente de tráfico que le costó la amputación de una de sus piernas. Pese a ello, el actor no se rindió y siguió adelante con su vida artística. Sus últimos trabajos estrenados han sido 'La Duquesa de Langeais', de Jacques Rivette, 'Versailles'. Pero aún tenía pendiente de estrenar 'Stella', y 'L'Enfance d'Icare', la película que se encontraba rodando cuando cayó enfermo.
Lorena Vialás (Fuente: El País.com)