Puede que ahora mismo existan pocos actores con el talento y el palmarés de Daniel Day-Lewis, o existirían sino fuera por la reciente, e inesperada, decisión del actor de retirarse. No se trataba de un suceso aislado, pues anteriormente ya había dejado aparcada la actuación para fabricar zapatos cómodamente en Florencia (en serio), pero sí parece tener visos de ser definitivo. Lo cual ha dejado en una peculiar coyuntura a El hilo invisible, la nueva película de Paul Thomas Anderson -con quien trabajó en Pozos de ambición-, que a la postre será la última oportunidad de ver a semejante animal interpretativo en acción.
Meses después de este dramático anuncio, Day-Lewis ha decidido hablar para W, y aclarar cómo se siente con respecto al inminente film. "Antes de rodar no sabía que iba a dejar la actuación. Paul y yo nos reíamos bastante antes de hacerla, pero al acabar ambos estábamos abrumados por un sentimiento de tristeza", reveló. "Nos pilló totalmente por sorpresa, no nos dimos cuenta de lo que habíamos hecho. Y era triste vivir con eso. Aún lo es", confesó, inquietándonos bastante de paso por el estado de ánimo de Thomas Anderson. ¿Será también El hilo invisible la última película de su director?
El tres veces oscarizado intérprete ha asegurado asimismo que no ha visto aún la película, ni tiene intención de hacerlo. "No quiero ver la película por la cual ha dejado de actuar. Pero eso no significa que ésta tenga la culpa de mi tristeza", detalla; "apareció durante el rodaje, y no sé por qué". Así de apesadumbrado se muestra un actor que lo consiguió todo antes de abandonar, y de cuyas magistrales dotes podremos disfrutar próximamente, el 2 de febrero, en la gran pantalla. ¡Mira el tráiler sobre estas líneas!
