Akira Toriyama tenía muy claro el camino a seguir después de la saga de Freezer: el grupo se enfrentaría a dos androides llamados C-19 y C-20. Este último era un científico que ya salió antes en la serie y había confinado su cerebro en un cuerpo sintético. Poco tardó en recibir una llamada desde Shonen Jump, la empresa que publicaba el manga, para avisarle de la decepción tras ver quiénes eran sus dos nuevos villanos: "Un viejo y un gordinflón". Imaginad la cara de decepción del mangaka, con todos sus planes tirados por el suelo.
Ni una célula en peligro
Sin embargo, hizo casi y presentó a dos androides más jóvenes y poderosos: C-17 y C-18. Pero entonces su editor volvió a llamarle para quejarse y decir "¿Y ahora qué? Son solos unos mocosos". Finalmente, no le quedó otra que sacarse de la manga a Célula, que, ahora sí, gustó en Shonen Jump. Sin embargo, para el recuerdo quedan los diseños maravillosos de estos enemigos primigenios que los fans tienen en mucha estima.
Y para prueba, el fabuloso cosplay que Buureal, un famoso cosplayer español, ha hecho del Dr. Gero, o sea, el Androide 20, con el gorro del ejército de la Red Ribbon. Además de estar medido al detalle, tiene en sus manos la larva de Célula que después llevaría al mundo a la extinción -al menos en el futuro alternativo de Trunks-. Impresionante.
Curiosamente, el Dr. Gero ha tenido una increíble importancia en Dragon Ball en años posteriores. De hecho, en su última película, Dragon Ball Super: Super Hero, se descubre que fabricó al Androide 16 en honor a su hijo muerto... y en uno de los videojuegos de la saga se deja caer que el número 21 no es otra que su también fallecida esposa. No, si al final hasta va a hacer que se nos salte la lagrimilla.
