La octava temporada de Juego de Tronos va a ser una muy importante para Arya Stark. La joven de Invernalia se enfrentará a su primera gran batalla, se reencontrará con su hermano favorito, Jon Nieve (Kit Harington) y tendrá por delante la complicada tarea de completar su lista de venganzas. La actriz que interpreta este personaje, Maisie Williams, ha arrojado luz sobre otro de los momentos que pocos teníamos en cuenta.
En declaraciones para EW, Williams ha dejado claro que estos últimos seis episodios pondrán a cada personaje en su lugar y permitirán el nacimiento de importantes alianzas como la que surgirá entre ella su hermana Sansa (Sophie Turner):
No es habitual que veas al personaje de Sansa unido a otro que no la esté manipulando. La última temporada fue muy difícil para Sansa, porque Jon estaba pensando con su pene y creo que eso hizo que Sansa pareciera un poco amargada. En esta temporada veremos a Arya y Sansa formar equipo, a veces cantándole las cuarenta a Jon. Ha sido divertido y poderoso estar de pie al lado de Sophie. Sophie y yo somos muy buenas amigas cuando estamos una frente a la otra, por lo que no ha sido necesario actuar
Las palabras de Williams son especialmente emocionantes si se tienen en cuenta los primeros episodios de la serie. Al comienzo de Juego de Tronos -en concreto en la primera temporada, dado que al final de la misma las dos hermanas se separan y no se vuelven a ver hasta la séptima entrega-, vemos como Sansa solo quiere cumplir con lo que se espera de ella como dama de Invernalia y formar así parte de la corte de los Baratheon-Lannister, mientras que su hermana Arya está demasiado ocupada en formarse como luchadora dejando a un lado la elegancia y delicadeza de su hermana.
Arya y Sansa son personajes opuestos al comienzo de la serie, pero a medida que avanzan los episodios, y a medida que ambas pasan por distintos traumas en las siete temporadas que se han emitido de Juego de Tronos, su evolución las lleva al mismo punto, al mismo objetivo: luchar por su casa, por Invernalia, cueste lo que cueste.
