Maisie Williams ya se ha despedido de Poniente y tiene otro proyecto en marcha: descansar. Para la joven actriz, el final de Juego de Tronos ha significado el inicio de una nueva etapa para explorar otros campos que no tengan nada que ver con la actuación. En una entrevista con Rolling Stone, Maisie ha admitido que su cambio de look -ahora lleva el pelo rosa- puede que sea un intento inconsciente para tomarse un respiro.
Creo que, de manera inconsciente, me lo he teñido porque no quería trabajar. Es una buena forma de pararlo. Y se siente muy bien. He luchado toda mi adolescencia intentando poner un sello a mi apariencia, pero también ser un lienzo en blanco como actriz
Williams ha interpretado a Arya Stark durante los últimos ocho años, periodo que ha ocupado toda su infancia y adolescencia. Por lo tanto, es comprensible que quiera tomarse un tiempo para reflexionar o cambiar de proyectos, al igual que hizo su compañero de ficción, Jack Gleeson. El actor que dio vida al inolvidable Joffrey Baratheon dejó de actuar porque le provocaba escalofríos que la gente le recordase por un personaje tan desagradable. Cuando dejó a un lado las cámaras, se centró en sacar adelante una compañía de teatro.
El final de Arya en 'Juego de tronos'
Arya ha tenido una gran evolución desde la primera temporada y ahora podría definirse como una 'máquina de matar'. Williams reconoce que en esta entrega parece que su personaje tiene dos personalidades: "...hay muchas emociones y recuerdos que regresan cuando estás con tu familia, y el hecho de que luchas para convertirte en algo muy diferente". Y es que, Arya va a continuar adelante con su lista y Cersei es una de las que quedan con vida: "Sí, ella aún se mantiene el camino de intentar matar a Cersei sin perder de vista su lista, acercándose poco a poco a ese objetivo".
No sabemos qué destino le depara a Arya en la serie, pero ella misma asegura que "habrá muchas muertes". La temporada 8 de Juego de tronos se estrena el próximo 14 de abril.
