Dime que estoy soñando

En una granja del interior de Francia vive una familia de granjeros cuyo hijo mayor, Julien, padece un cierto retraso mental. Al chico, de diecinueve años, le cuesta relacionarse con los demás, ya que los vecinos de la aldea intentan evitarle y desean que sea internado en un sanatorio mental. La familia, aunque se opone a ingresarlo, también presenta un comportamiento extraño hacia Julien.

Por esos motivos, el joven ha establecido un estrecho lazo con su vaca, a la que le ha puesto el nombre de Julianne. Este entrañable vínculo se debe al ternero de dos cabezas que Julianne trajo al mundo y al que toda la gente le daba repulsión. Fue ahí cuando Julien se sintió identificado con la vaca y su ternero y decidió que no los dejaría solos.

La situación familiar cada vez será más tensa hasta que un día toda esa tensión acumulada se convierta en reproches y disputas.