Hoy vivimos una época cinematográfica donde destacan las historias sobre los dilemas de la inteligencia artificial, la cual por un lado, puede facilitar y entretener nuestras vidas, pero que por otro, puede rebelarse y acabar con nuestra existencia como la conocemos. Yo Robot y las series Westworld y Black Mirror son un buen ejemplo de este tipo de cintas. Ex Machina se suma a este catálogo que difícilmente decepciona, la película cumple con las expectativas del género. Tú ya sabes a lo que te enfrentarás, tú ya sabes cómo terminará esta historia, y decepcionante o no, no hay factor sorpresa, esta película ya las has visto o has leído su desenlace en otro lado. Eso sí, tiene varios puntos fuertes que la hacen única, como lo son sus efectos visuales, que están estéticamente bien logrados y garantizan una experiencia inmersiva al laboratorio donde transcurre los experimentos para testear la humanidad de un ente con inteligencia artificial. Además de su fuerte, aunque no novedosa, crítica sobre los peligros de nuestra privacidad, así como los conflictos éticos, en una era de sobreconsumo tecnológico.