Clint Eastwood es un icono para diferentes generaciones, al margen de que a veces le salga un poquito su vena racista, como cuando defendió a Donald Trump en 2016 de serlo, pero bueno, todos tenemos nuestras cosillas al final del día. Al margen de eso, es innegable su calidad actor y como director. Esta última faceta nos ha dejado largometrajes para el recuerdo como Million Dollar Baby, Gran Torino o Invictus y la primera, por supuesto, Los Puentes de Madison. Lo siento, pero no puedo no nombrarla. Eso sí, de acuerdo a mi compañera Sara, su mejor trabajo de entre todas sus obras maestras es este.
El intérprete estadounidense, que cumplió en mayo 93 años, sigue a pesar de su edad manteniendo una salud y una vitalidad envidiables, algo que él atribuye en gran medida a su alimentación y según hemos leído en 20 Minutos, hay tres consejos relacionados con esto que él considera imprescindible para sentirse así de bien.
Poca grasa y muchas proteínas
De acuerdo a una entrevista que el actor concedió a la revista Closer, su padre se atiborraba de carne y de patatas fritas, una dieta no demasiado equilibrada que provocó que padeciese problemas cardiovasculares, algo que terminó desembocando en su muerte cuando aún era joven.
Por supuesto, esto marcó a Clint Eastwood, por lo que destacó para el medio que intenta controlar la ingesta de alimentos grasos y en su lugar comer verduras crudas y fruta y la carne y el pescado tomarlos hervidos. Para él también son un no, siempre y cuando los puede evitar, los postres y los refrescos.
Estos hábitos además los han seguido también sus hijos, incluido el también intérprete Scott Eastwood, que destacó que su padre come de forma sana el 90% del tiempo y que juega con ese margen para hacer sus "cheat meals".
Su médico, el doctor Harry Demopoulos, que además asegura que el porcentaje corporal del protagonista Harry El Sucio nunca superó el 10%, lo que es una bestialidad, se alimenta a base de proteínas saludables y ricas como el salmón y el pollo además de muchas verduras de hoja verde.
Cero azúcar y cero alcohol
En otra entrevista que concedió a la revista Muscle & Fitness, actualmente publicada en Physical Culture Study, Eastwood confirmó que prestaba mucha atención al nivel de colesterol y azúcar en sangre, por lo que no solía consumir bebidas con gas, ni zumos. ¡Ni que decir tiene alcohol! Por supuesto, hay excepciones, pero en la mayoría de ocasiones, según sus palabras, el intérprete lo evita.
Lo de comer por comer no va con él
Scott Eastwood también señaló en 2017 para Men's Health que su padre es una máquina en lo que respecta a la comida y el ejercicio, es decir, sigue los criterios que más le favorecen de acuerdo a los profesionales de forma inquebrantable. En el mismo reportaje destacó que su padre no come por placer, es decir, no ve la comida como algo de lo que disfrutar siquiera, sino como un proceso más para continuar con vida, básicamente. Y oye, que muy bien, ¿pero que tampoco es para tanto, no?
