Martin Scorsese es uno de los directores con mayor éxito de los últimos años. En su filmografía se encuentra películas como Los asesinos de la luna -estrenada en cines hace un año-, El lobo de Wall Street o Uno de los nuestros. Con esa impecable trayectoria a sus espaldas, la opinión del cineasta es de relevancia para los espectadores por lo que se le suele preguntar por sus gustos cinéfilos. Y una de las últimas fue cuál consideraba que era la mejor escena de batalla grabada en el séptimo arte.
Ni Braveheart ni Gladiator, para Martin Scorsese la mejor escena de batalla jamás filmada se hizo hace 57 años y nadie ha podido superarla. En una entrevista con Time, el director de Los asesinos de la luna ha señalado Campanadas a medianoche, la cinta de Orson Welles estrenada en 1965, como uno de los títulos imprescindibles si hablamos de luchas bélicas.
En palabras de Scorsese, Welles logró representar una batalla en pantalla como ningún otro lo había hecho y, a día de hoy, sigue sin ser superado. "Creo que si vas a ver a Welles, deberías ver Campanadas a medianoche. Hay tantos niveles diferentes en la película. De esta obra 'shakesperiana' surge una extraordinaria realización cinematográfica", dice el autor.
En lo que respecta a las escenas de acción, la mejor escena de batalla jamás filmada está en Campanadas a medianoche. Sé que los chicos que hicieron Braveheart lo estudiaron, sé que lo estudiamos mucho. Es diferente de Eisenstein, es diferente de Alexander Nevsky, es diferente de Potemkin, por supuesto. Nunca ha habido nada parecido
Orson Welles es conocido mundialmente por ser el director de Ciudadano Kane (1941), el gran hito de la historia del cine, pero también por estar detrás de Sed de mal (1958) o La dama de Shanghái (1947). Su carrera está plagada de obras maestras y, sin embargo, recomendar Campanadas a medianoche no es nada común. Scorsese es un ferviente seguidor del trabajo de Welles y asegura que su trabajo le cambió la vida.
Ciudadano Kane adapta una obra de William Shakespeare y cuenta la historia del rey Enrique IV de Inglaterra, en el siglo XV. Está cansado de ver a su hijo Harry perder interés en el reino y pasar todo su tiempo bebiendo y festejando en compañía de un personaje singular: el truculento Falstaff.
La escena en cuestión de la que habla Scorsese tiene lugar en la segunda parte de la película, cuando Harry decide ir a la guerra en nombre de su padre contra los ejércitos de Hotspur, en la batalla de Shrewsbury.
Campanadas a medianoche
Scorsese también ha declarado que no le gusta nada elaborar Top 10 de películas porque nunca puede quedarse solo con una decena. "A lo largo de los años, he intentado hacer listas de películas que personalmente considero mis favoritas. Luego te das cuenta de que la palabra 'favorita' tiene varios significados diferentes", cuenta el director, "Están las películas que más nos impresionaron, las películas que simplemente nos gusta ver una y otra vez, y aquellas que vemos una y otra vez y que nos siguen enseñando o que nos ofrecen una nueva experiencia".
