"Una de las películas favoritas de los Oscar", afirmaba entusiasmado el crítico y 'publisher' de SensaCine Alejandro G. Calvo tras acudir a la proyección de The Smashing Machine en la pasada edición del Festival de Cine de Venecia. Allí, la película dirigida y escrita por Benny Safdie y protagonizada por Dwayne Johnson en la piel del mítico luchador de la MMA Mark Kerr fue objeto de grandes elogios por parte de la crítica y recibió una ovación de 15 minutos, una de las más largas de este año.
Ahora, solo un mes después de ese emocionante momento, The Smashing Machine está a punto de llegar a las salas de cine españolas. Su estreno es el próximo viernes 3 de octubre y la expectación es total: hay consenso entre la crítica de que en ella Dwayne Johnson ejecuta una de las mejores interpretaciones de toda su carrera.
Todavía está por ver si Johnson acaba colándose entre los candidatos a Mejor actor en los próximos premios organizados por la Academia de Cine en la que sería la primera nominación de su carrera, pero las previsiones de que pudiera estarlo son la mejor prueba de que el intérprete ha hecho un excelente trabajo.
En ella Johnson encarna a Mark Kerr, un luchador y experto en artes marciales ganador de diversos títulos mundiales cuyas adicciones no le depararon el mejor futuro. Tras una serie de éxitos como luchador, los Juegos Olímpicos de 1996 en Atlanta (Estados Unidos), marcaron el fin de su carrera en la lucha libre: no logró entrar en el equipo olímpico estadounidense. Tras el golpe, Kerr buscó alternativas encontrando lo que buscaba en las artes marciales mixtas, aunque tuvo que volver a labrarse un nombre con disciplina y determinación para regresar a su posición como atleta de élite.
Pronto, Kerr dominó el panorama competitivo, pero se convirtió en un gran problema para los organizadores: noqueaba a sus oponentes tan rápido que simplemente no había tiempo suficiente para hacer pausas comerciales lucrativas. Para frenar esto, algunas de sus mejores técnicas fueron prohibidas explícitamente, incluido el cabezazo. Quizás fue mejor así, ya que el deporte le afectó enormemente. No podía pasar el día sin analgésicos. Una adicción que también puso en riesgo su matrimonio con Dawn, interpretada en la película por Emily Blunt.
Un biopic "inusitadamente clásico en su estructura narrativa en tres partes adecuándose perfectamente al género de películas deportivas", apuntaba G. Calvo en su crítica durante el festival. "La película tiene momentos preciosos. No asfixia al espectador. Deja mucha libertad para disfrutar de este entramado clásico. Muy potente, muy buena".
"Lo que sorprende es lo bien que Johnson interpreta el papel, no solo físicamente sino también con su actitud calmada y racional, acentuada por raros ataques de furia aterradora", aseguraba The Verge más concretamente sobre el trabajo de Johnson. Y, como esta de la BBC, es solo una de tantas: "Johnson es probablemente el único actor vivo que podría interpretar a Kerr de manera convincente: su cuerpo colosal y esculpido llena la pantalla y... su imponente apariencia plantea la pregunta de por qué Marvel utilizó CGI para Hulk en las películas de Los Vengadores".