La historia del cine está llena de actores que se sacrifican para bordar sus papeles y Jared Leto es uno de ellos. Si hace poco te contábamos cómo Heath Ledger se preparó para ser el Joker en El caballero oscuro, ahora hablamos de la dura preparación por la que pasó el nuevo Joker para interpretar al drogadicto Harry Goldfarb en Réquiem por un sueño. Según declaró el actor, lo hizo, no sólo para conseguir el físico de un adicto a las drogas, sino para meterse en la mente de su personaje.
Jared Leto llegó a adelgazar 12 kilos, dejó de comer y se autoimpuso dos meses de abstinencia -por aquel entonces estaba prometido con Cameron Diaz-. Después del rodaje, el actor admitió que el papel de Harry había sido "sadomasoquista... La cosa más difícil que he hecho". En una entrevista con Jam! Showbiz declaró que un sábado estuvo merodeando por "una tienda de comestibles durante una hora o dos simplemente mirando la comida. [...] Lo hice porque sentí realmente que iba a darme alguna pista para hacer de Harry. [...] Creo que lo hizo. Harry y todo el mundo en la película están en un constante estado de ansia".
No ha sido la última vez que Leto se ha metido de lleno en la piel de un personaje. Ya lo hizo en El asesinato de John Lennon, donde engordó 30 kilos para interpretar a Mark Chapman, y, más recientemente, en Dallas Buyers Club, gracias a la cual se hizo con el Oscar a Mejor Actor Secundario en 2014.
Jared Leto en 27 looks
