Para interpretar a Lisbeth Salander, Rooney Mara se transformó en la hacker dentro y fuera del rodaje. "Antes, vestía mucho más femenina. Un montón de cosas de colores. Ahora, literalmente, me encanta saltar de la cama y ponerme lo que esté por ahí. Realmente he disfrutado ser un chico durante el año pasado".