La conocimos en Érase una vez en América haciendo de la pequeña Deborah y años después como la intrépida Sarah de Dentro del laberinto de Jim Henson. Desde entonces, Jennifer Connelly ha participado en filmes como Dark City, Réquiem por un sueño, Una mente maravillosa -por la que ganó en 2002 un Oscar a la Mejor Actriz de Reparto- y esta American Pastoral (Pastoral Americana), el debut del escocés Ewan McGregor detrás de las cámaras. En ella, la neyorquina interpreta a Dawn Levov, una ex reina de la belleza cuya vida empieza a desmoronarse cuando las creencias de su hija se radicalizan.
Para su ópera prima, el ya director se ha atrevido a adaptar la ganadora del Pulitzer de 1998 de Philip Roth que, junto a Me casé con un comunista y La mancha humana, compone su célebre 'Trilogía estadounidense'. Seymour 'El Sueco' Levov (Ewan McGregor) es un ejemplo de trabajador intachable en la Norteamérica de los años 60. Con una vida prácticamente perfecta, sus valores y convicciones irán erosionándose después de que Merry (Dakota Fanning), su pequeña, cometa un acto terrorista para denunciar la participación de EE.UU en la Guerra de Vietnam. Lee a continuación la entrevista que le hicimos a Connelly durante el pasado Festival de San Sebastián. American Pastoral ya está en cines.
¿Qué opinas de las contradicciones en tu personaje? Intenta escapar de su apariencia de 'beauty queen' y encontrar algo más pero, al final, acaba preocupada en exceso por su aspecto físico.
Creo que lo que le pasa es muy trágico. La etiqueta de "reina de la belleza" es una definición que la persigue. A veces es lo primero que la gente menciona sobre ella... pero no es como se ve ella misma. Ella rechaza esa parte de ella en busca de algo más auténtico. Y lo encuentra en la vida junto a su marido y su hija. Ahi encuentra una experiencia auténtica y una conexión profunda. Es donde alcanza la realización. Y cuando su hija rechaza su vida, pienso que se siente completamente desarmada. Y, básicamente, no puede superar esa experiencia y esa pérdida. Se siente tan desestabilizada, que tiene que construir una nueva vida para ella y crear una nueva historia y un nuevo discurso. Y por eso sufre una regresión, adapta aquello que nunca quiso ser. Es muy trágico. Y después me pregunté: "¿Era eso lo que siempre había sido?". Pero no creo que lo fuera... Pero sí que es lo que esperaba la gente de ella. Por eso ella se sintió indignada durante años. Pero al final lo abraza y se rinde ante ello.
¿Es difícil vender este tipo de historias en un Hollywood de 'reboots', secuelas, superhéoes...?
No sé... Creo que ahora hay menos grandes producciones dramáticas. Parece que los estudios se embarcan en menos dramas que en otros momentos de la historia. Incluso creo que hace 15 años se hacían más dramas de tamaño medio. Los estudios se dedican cada vez más a hacer grandes películas 'tent-pole'. Esa ha sido la tendencia en el cine. Siempre hay excepciones. Pero sí parece que hay menos.
¿Por qué elegiste participar en American Pastoral?
Me gustó mucho la historia. Me gustó mucho el personaje. El papel. Pensé que era un viaje interesante desde un punto de vista emocional. Respondí a eso y me pareció muy interesante intelectualmente.
¿Hasta qué punto son los padres responsables de los actos de sus hijos?
Creo que es una pregunta interesante porque... es una mezcla de ambas cosas. Yo tengo tres hijos y los tres son extremadamente distintos de muchas formas. Y fue como si vinieran con una serie de características muy particulares. Y cuando digo "como si vinieran", me refiero a que nacieron siendo así. Lo sentí desde muy al principio. Por eso creo que hay cosas con las que nacemos. Pero pienso que podemos influir en ellas absolutamente. En el cómo se desarrollan esos rasgos. Así que asumo mucha responsabilidad... En mi vida personal, siempre intento alentar a mis hijos y ayudarlos de la manera más sana posible. Si algo no funciona, siempre me fijo en mí primero para ver si estoy contribuyendo a la situación. A menudo los niños son un reflejo de aquello que experimentan. Pero tienen muchas influencias. No es enteramente la culpa de sus padres que algo así pasara con Merry. No creo que la gente pudiera decir eso. Realmente no lo sabemos. Es muy complejo. Podríamos preguntarnos: "¿Proviene este estado salvaje de ella? ¿Es cultural? ¿Es algo innato? ¿Es obra de sus padres?".
Hace mucho que no te vemos en una comedia...
Me gustaría hacerla... Para ser sincera, es algo que simplemente pasa. Si empiezas a trabajar en algo, te sale más trabajo de ese algo... Digamos que no me ofrecen demasiadas comedias. O ninguna (Risas). O recibo algunas pero resulta que son realmente malas y nada divertidas... No quiero hacer una que sepa que no vaya a funcionar porque sería la gota que colmaría el vaso. No he encontrado la apropiada.
