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    'La Torre Oscura', la dolorosa caída de una prometedora saga: todo lo que ha ido mal con la saga de Stephen King
    Sara Heredia
    Sara Heredia
    -Redactora jefe SensaCine
    Cargada con una mente abierta y mucha curiosidad, explora cualquier documental, película, serie y miniserie que empiece a hacer ruido.

    Esta noche en La Sexta (22.30h) puedes disfrutar de la cinta que adapta la saga de Stephen King.

    La Torre Oscura iba a ser el inicio de una de las mayores sagas cinematográficas de la pasada década, pero las críticas negativas cerraron por completo esta posibilidad. La cinta, basada en las novelas de mismo nombre de Stephen King, era una prometedora apuesta y, sin embargo, algo falló. Hoy puedes comprobarlo por ti mismo, ya que emiten La Torre Oscura en La Sexta a las 22.30h. Si prefieres verla por tu cuenta, está disponible en 'streaming' en Netflix y HBO Max.

    La torre oscura
    La torre oscura
    Fecha de estreno 18 de agosto de 2017 | 1h 35min
    Dirigida por Nikolaj Arcel
    Con Idris Elba, Matthew McConaughey, Tom Taylor (IV)
    Medios
    2,2
    Usuarios
    3,1
    Sensacine
    2,5

    Como decimos, La Torre Oscura se basa en las novelas de mismo nombre de Stephen King. Se ambienta en un mundo ficticio donde las ciudades han desaparecido sin dejar rastro y todo tiene el aspecto del Viejo Oeste. El tiempo no corre de la misma manera y la humanidad está amenazada. En este contexto, Roland Deschain (Idris Elba), perteneciente a los Pistoleros, emprende la búsqueda de un edificio mitológico conocido como La Torre Oscura que, según cuenta la leyenda, es donde convergen todos los universos.

    Había mucha expectación en torno a esta adaptación, ya que los libros cuentan con un gran número de seguidores. Se compone de ocho volúmenes, de ahí que Sony Pictures la viese como la candidata ideal para convertirse en una franquicia cinematográfica y televisiva. No fueron los únicos. Antes que Sony, J.J. Abrams y Universal Pictures habían intentado desarrollar la saga literaria, pero dieron marcha atrás. Un proyecto de estas magnitudes -por extensión y complejidad de la trama- necesita una gran implicación y tiempo para encontrar el estilo que mejor le viene para la gran pantalla y parece que ahí es justo donde están todos los problemas.

    Un complicado proceso de adaptación: 10 años y varias compañías hasta su estreno

    El primero que se puso al lío fue J.J. Abrams, quien intentó adaptarla en 2007 junto a Damon Lindelof. En ese momento, los dos andaban liados con Perdidos y, aunque expresaron varias veces su intención de desarrollar la producción, lo cierto es que no se vieron con las fuerzas de involucrarse en un proyecto tan grande justo después de terminar una serie tran grande como la del vuelo de Oceanic Airlines.

    Unos meses después de que Abrams liberara la historia, llegó Universal Pictures con Ron Howard. Sus planes eran hacer una trilogía cinematográfica y dos temporadas de una serie de televisión que se emitirían en el descanso entre películas. El cineasta se puso a trabajar en ello entusiasmado, pero el estudio no le daba luz verde. La adaptación requería un gran presupuesto que Universal no podía facilitar y, a pesar de que hubo intentos por hacer colaboraciones con otras compañías, el proyecto finalmente quedó desechado.

    Así llegó Sony, que se quedó con los derechos y confió en Akiva Goldsman (Una mente maravillosa, Batman y Robin) y Jeff Pinkner (Fringe) para reescribir el guion. Ron Howard, que hasta entonces había trabajado estrechamente en la adaptación, abandonó su puesto de director y ocupó el de productor. En su lugar, llegó Nikolaj Arcel, realizador con cuatro películas en el mercado -la más destacada Un asunto real- y una larga carrera como guionista (Millenium 1: Los hombres que no amaban a las mujeres) que se dejó llevar por el fenómeno de Stephen King.

    Todo empezó a fluir más fácilmente en esta ocasión. Matthew McConaughey entró en el proyecto para dar vida a El Hombre de Negro, Idris Elba fichó para convertirse en Roland Deschain y, poco a poco, se completó el reparto con nombres como Abbey Lee y Tom Taylor. Ahora ya sí, el rodaje comenzó en abril de 2016.

    'La Torre Oscura', una adaptación fallida que cerró las puertas a una secuela

    Las predicciones señalaban que La Torre Oscura podría llegar a los 20 millones de dólares en su estreno en Estados Unidos y no se equivocaron del todo, puesto que llegó a los 19,5 millones. Acabó haciéndose con 113 millones en todo el mundo. No eran los números que se podrían esperar de una adaptación de este tipo, pero, al menos, consiguieron sacarla adelante y hacerlo, además, con un presupuesto de 60 millones de dólares. Esta fue la verdadera victoria para Sony -la producción de Ron Howard, por ejemplo, estaba planeada para llegar a los 160 millones, según Deadline-.

    El estudio pensó que La Torre Oscura era algo arriesgada para llegar a un amplio número de espectadores. Juntaba muchos géneros y decidieron ir sobre seguro con un presupuesto más acotado. Quizás este miedo a salirse de lo convencional fue lo que provocó una adaptación confusa que recibió críticas muy negativas. Al menos, es lo que señala el crítico Alberto Corona en su crítica para SensaCine: "La torre oscura se conforma con ser un esbozo de todo lo ideado por Stephen King, cuidándose de ser más o menos coherente mientras la inventiva y arrojo que mostrara el novelista se ven reducidos a una genérica, y correcta hasta lo enervante, película de aventuras". 

    La torre oscura

    Esa falta de imaginación es lo más criticado de la cinta de Nikolaj Arcel. Tras la mala acogida, los creadores aceptaron que no habían hecho algo a la altura del material original y que quizás se habían dejado llevar por lo que creían que quería el público, en lugar de ser fieles a su visión, según declaró Ron Howard en el podcast de Josh Horowitz.

    Ocurriese lo que ocurriese, lo cierto es que los planes para la secuela fueron pausados en favor de una serie de televisión. Este formato podía acoger mejor una historia compleja como la que Stephen King plantea en sus novelas y también daba la opció de empezar de cero, obviando el largometraje. Es justo lo que quería hacer Amazon, que se hizo con los derechos de la historia para desarrollarla como un reinicio de la saga. Sin embargo, decidió no seguir adelante con la ficción, dando una prueba más de lo complicado que es llevar el universo de Roland Deschain a lo audiovisual.

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