La docuserie Enrique y Meghan que veía la luz hace apenas una semana en Netflix lleva generando ampollas en Reino Unido incluso desde mucho antes de estrenarse, así que no es de extrañar que una vez disponibles sus tres primeros episodios la controversia haya crecido aún más. La expectación era contundente por motivos obvios y así se ha reflejado en los datos de audiencia que ha compartido la compañía de 'streaming', que ya ha sentenciado que el documental ha batido un récord en la plataforma.
La serie documental, que este jueves 15 de diciembre estrena los tres episodios restantes, ha logrado acumular más horas de visionado en el servicio de 'streaming' que cualquier otro documental durante su primera semana, según ha informado Netflix este martes. Los datos que maneja la plataforma reflejan que los primeros tres episodios de Enrique y Meghan registraron 81,55 millones de horas de visionado en todo el mundo tras su debut el pasado jueves 8 de diciembre: "el mayor número de horas de cualquier título documental en una semana de estreno", según la compañía, que añade que más de 28 millones de hogares vieron al menos una parte de la docuserie.
Que a Netflix le iba a salir bien la jugada de contar con un documental de varios episodios en el que los propios Duques de Sussex contasen su historia de amor, su experiencia como pareja dentro de la familia real británica y todo lo relativo a la controvertida decisión de abandonar sus funciones como miembros activos de la realeza y mudarse a Estados Unidos parecía algo asegurado. Sin embargo, a pesar de los grandes datos de audiencia, de la atención mediática y de la enorme conversación en redes sociales, han sido muchos los que han señalado que el Príncipe Harry y Meghan Markle no han contado mucho más de lo que ya hicieran en su día en aquella famosa entrevista con Oprah Winfrey.
En cualquier caso, su relato sí ha dejado varias revelaciones de las que rápidamente se han hecho eco los medios como los primeros encuentros entre Meghan Markle y la Reina Isabel II -y la famosa reverencia que tanto está dando qué habalr- o con su concuñada Kate Middleton, o la falta de apoyo que habían recibido por parte de la familia real británica respecto al acoso de los medios y los tintes racistas de muchas publicaciones sobre Meghan, su familia y su pasado.
Las reacciones no se han hecho esperar y varias de las afirmaciones de los protagonistas de la serie documental se han puesto en cuestión, como la negativa de la familia a participar en el documental o las anécdotas de Meghan sobre la famosa reverencia o la falta de ayuda para interiorizar el protocolo. Asimismo, los medios están haciendo un gran hincapié en cómo afecta el controvertido documental a la relación familiar y a cómo habría sido recibido en el Palacio de Buckingham, mientras que en las redes sociales pueden encontrarse miles de comentarios en la misma línea, con grandes críticas hacia Meghan Markle, denunciando inconsistencias y a sus verdaderas razones (económicas) para hacer todo esto.
Meghan Markle y el Príncipe Harry tenían una razón de peso para decir que sí al documental de NetflixSin embargo, como mínimo en los tres primeros episodios de la serie Meghan Markle y el Príncipe Harry han dedicado prácticamente la totalidad de sus críticas a las malas prácticas de los tabloides británicos y han acusado directamente de la presencia del elemento racial en las críticas hacia ella desde que se hiciese pública su relación.
A pesar de la imagen que se da sobre ellos y sobre la relación entre la familia real y la prensa y ese revelador acuerdo que Harry nunca aceptó pero con el que tuvo que vivir, la reacción de los medios al documental se ha centrado principalmente en los comentarios implícitos y bastante dispersos sobre otros miembros de la realeza y especialmente en todo lo que hace, dice o cada gesto que hace Meghan, a quien se señala como una manipuladora.
También los espectadores. Se habla de respeto, de traición, de memoria, de falta de agradecimiento, de manipulación y de mentiras, pero se tratan por encima las acusaciones de racismo o las malas prácticas periodísticas en el que tanto hincapié hace realmente el relato de los afectados, la experiencia a la que hicieron frente y las verdaderas razones que los llevaron a tomar su drástica decisión. Y no deja de ser curioso, porque ese es realmente el núcleo del documental.
Los tres nuevos episodios de Enrique y Meghan se estrenan este jueves 15 de diciembre en Netflix.