Hace seis años que llegó a las vidas de muchos gamers para quedarse y el paso del tiempo no ha conseguido que pase de moda. De hecho, el querido videojuego desarrollado por Epic Games Fortnite es actualmente el principal pilar de la compañía y su modo competición de 'battle royale' se ha convertido en todo un evento para sus millones de fans en todo el mundo. El más importante de todos la gran final del Campeonato Global de la FNCS 2023 que se ha celebrado el pasado fin de semana en Copenhague, con 4 millones de dólares en premios.
Sin embargo, la cita más importante de Fortnite este 2023 ha tenido un protagonista inesperado: un jugador, bastante popular en la comunidad del juego, llamado Logan Eschenburg y apodado como "Bucke", que se ha visto descalificado sin previo aviso tras haber viajado desde su país, Estados Unidos, a Dinamarca para disputar el torneo.
Según ha revelado él mismo y tal y como recogen nuestros compañeros de 3DJuegos, ni siquiera pudo subir al escenario para competir, puesto que a su llegada la seguridad del evento se dirigió a él para acompañarle a la salida: "Vinieron cuatro guardias de seguridad que me escoltaron fuera. Me acompañaron al hotel, me dejaron recoger mis cosas mientras esperaban en la puerta y me escoltaron hasta salir del ascensor".
Respecto al motivo de su descalificación, Logan Eschenburg todavía espera a conocer los detalles más concretos por los que Epic Games habría tomado la drástica decisión: "Hemos llegado a la conclusión de que has sido descalificado de la FNCS Global Championship. Esta decisión es definitiva y eso es todo lo que puedo decirte. Recibirás un correo electrónico con más información cuando estés en América. Tenemos un vuelo para ti dentro de tres horas", asegura Bucke que le dijeron "palabra por palabra".
Según parece, el jugador podría haber roto una de las reglas del código de conducta del torneo en algunas de sus retransmisiones en 'streaming' antes de la celebración del torneo, tal y como habrían especulado algunos participantes. No obstante, la razón tendrá que ser explicada por Epic Games, tal y como le han comunicado al jugador.
El suceso con el 'streamer' ha adquirido mucha atención durante la celebración del torneo y, al mismo tiempo, ha perjudicado a su compañero en la competición, puesto que se desarrollaba por parejas: al no poder competir con normalidad, el jugador terminó en último lugar, con 4.000 dólares por su actuación.