Los medios apuntan este papel como "el verdadero punto de inflexión" de la carrera de Pedro Pascal

Todos quieren un pedacito de Pedro Pascal. Así es como tituló Vanity Fair su extenso reportaje acerca del actor de moda y no podemos estar más de acuerdo: está viviendo su época dorada. No podemos alegrarnos más por él porque el chileno ha trabajado duramente durante décadas para poder dedicarse exclusivamente a la interpretación, sin tener que depender de su posición como camarero para comer -la cual se le daba francamente mal, según él mismo ha reconocido-.

Pascal no tuvo mucha suerte como actor en Nueva York, donde había estudiado en la Escuela de Artes Tisch, así que se mudó a Los Ángeles para hacerse un hueco en Hollywood. Allí consiguió papeles en Buffy, cazavampiros y Tocados por un ángel, que le ayudaron a tomar aire antes de volver a tener dificultades económicas. Tras estos primeros papeles, tuvo que abandonar California para regresar a la Gran Manzana y volvió a pasar hambre. "Lo ha hablado públicamente. Hubo momentos en que le daba mi paga diaria de un trabajo para que tuviera dinero para alimentarse", comentó su buena amiga Sarah Paulson.

Por suerte, todos esos años de esfuerzos le han salido bien. Tras estar a punto de dejar su sueño por enésima vez, todo cambió en 2013.

Ese año, Sarah Paulson habló con su amiga Amanda Peet. Ésta estaba casada con David Benioff, uno de los creadores de Juego de tronos, y Paulson le pidió si le podía pasar una cinta de Pedro para que le echara un vistazo. Resulta que Pascal se había enterado por un joven actor al que estaba asesorando que HBO andaba tras la pista de su Oberyn Martell idóneo y le pidió el favor a su amiguísima. Benioff le vio perfecto para interpretar a Martell, quien llega a Desembarco del Rey para formar parte del Consejo Privado del rey Joffrey Baratheon.

Este papel cambió su carrera y su vida y no lo decimos solo nosotros. Para medios como Los Angeles Times, Martell fue "el verdadero punto de inflexión de su carrera" y MovieWeb también señala que su carrera se disparó tras aparecer en la ficción de Benioff.

HBO

Su filmografía habla por sí sola. Fue el carismático Martell durante 7 episodios y justo después pasó a protagonizar tres temporadas de Narcos. Enlazar estos dos proyectos fue más que suficiente para que Pedro Pascal se asentara como actor y que se convirtiera en la estrella a la que todos quieren. The Mandalorian y The Last of Us llegaron cuando ya era conocido, pero volvieron a colocarle en la cresta de la ola.

Tal es así que en 2025 ha estrenado cuatro grandes títulos: en abril vimos su regreso como Joel en la temporada 2 de The Last of Us; el 25 de julio estrenó Los 4 fantásticos: Primeros pasos, película llamada a rescatar a Marvel; está a puntito de llegar a cines Materialistas, una cinta romántica muy esperada; y en septiembre volverá en Eddington, al lado del director de terror Ari Aster. Todos queremos un pedacito de Pedro Pascal, pero por suerte hay para todos.