Un nuevo portero llega a la mansión de los Davenport y establece un vínculo inusual con la hija menor de la familia británica. Al mismo tiempo, Lord y Lady Davenport lidian con el caos provocado por la boda de su hija mayor con su primo, un hombre bastante mujeriego, que convierte la celebración en un desastre épico.
Entre intrigas familiares, secretos y tensiones, el portero se ve envuelto en la dinámica de la familia, creando situaciones inesperadas y revelando relaciones ocultas, mientras los Davenport intentan mantener las apariencias y controlar los conflictos familiares.