Crítica de SensaCine.com para Sólo ellas… los chicos a un lado: El testamento fílmico de Ross

Solo ellas...los chicos a un lado, rodada en 1995, fue el lamentable y triste testamento fílmico del director Herbert Ross. Desde su debut en 1969, Ross había llevado a cabo una filmografía, durante los setenta y los ochenta, mucho más interesante (incluso con títulos como Dinero caído del cielo una excelente película) que aquellos títulos que conforman su actividad durante los noventa y que culmina con Solo ellas...los chicos a un lado, una película sencilla, basada en los diálogos y en las actrices protagonistas pero que carece de todo atisbo de ingenio o inventiva en el plano visual, lo que ocasiona que la película se adentre peligrosamente en el terreno del telefilm malo. Además, posee ese halo de película de sensibilidad para mujer que aunque posee momentos más o menos simpáticos adolece de una cursilería apenas soportable.

A favor: A pesar de sus defectos, Ross logra elaborar el material con cierta personalidad.

En contra: Que poco a poco acaba derivando en una ñoñería absoluta.