Lazos de sangre

Lauren es una chica normal con una vida perfectamente normal, agradable sin ser rutinaria, tranquila sin ser aburrida, y que se encuentra entusiasmada por su trabajo, en el que vislumbras grandes posibilidades de ascender. Sin embargo, toda esta prometedora y respetable trayectoria da un súbito vuelco cuando es acusada falsamente de haber cometido un sangriento asesinato: hay alguien ahí fuera que posee exactamente su mismo ADN y que la está incriminando en todas sus tropelías, dejando pruebas que lleven a la policía hacia la protagonista. Lauren ahora se encuentra acosada por las fuerzas del orden, que no atienden a ningún tipo de razón, y ha de actuar a contrarreloj si quiere demostrar su inocencia y recuperar su antigua vida, al tiempo que consigue que el verdadero asesino sea llevado ante la justicia.