Frequency

En el siglo XXI, el cine fantástico y de ciencia ficción se vuelve doméstico. Lo importante ya no es tanto salvar el mundo, sino sobrevivir a las historias personales. En 'Frequency', el viaje en el tiempo ya no es un gran proyecto internacional, sino un hombre desde su casa que consigue hablar con el pasado gracias a una anomalía meteorológica.Precedente claro del 'Déjà Vu' de Tony Scott, esta película de Gregory Hoblit consigue mantener de manera fantástica la intriga a base de ir saltando de una línea temporal a otra, como si fuera un intercambio de golpes. Pura teoría del montaje, donde la lógica temporal ya no tiene mucho sentido en cuanto ha sido cuestionada por un fenómeno fantástico e imposible.Cine humilde, de gozar en la multisala, sin grandes aspiraciones pero sí muy buenos resultados. Cine que ya no se hace, en una industria cada vez más dividida, al igual que el mundo, entre