La feria de las vanidades malsanas
por Alejandro G.Calvo
Cuenta la Wikipedia que el escritor William Lindsay Gresham, autor de la novela en la que se basa El callejón de las almas perdidas (1946) -recientemente reeditada- tuvo la idea para escribirla cuando estaba luchando en la Guerra Civil Española formando parte de las Brigadas Internacionales. Fue entonces cuando en un pueblo vio una feria donde presentaban a “El Monstruo”, que no era más que un borracho al que suministraban más alcohol cuantas más serpientes y gallinas vivas devorara delante del público. Esa imagen, terrorífica, sería la base de la que partiría su novela: la del hombre reducido a cenizas, sometido a lo más perentorio, la fuga constante de la vida por la vía del alcoholismo destructivo. (Recomiendo a todo el mundo leer la espectacular novela, por otro lado, que ha sido también el detonante que empujó a Guillermo del Toro a hacer su propia versión de la historia).
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Un año después de la puclicación del libro, llegaba su adaptación cinematográfica El callejón de las almas perdidas (1947) a cargo de Edmund Goulding con Tyrone Power como protagonista principal. Un film noir duro, seco y terrorífico que se asoma a la retorcida alma de Stanton, un mentiroso compulsivo que ansía fama y dinero a base de engañar a todos aquellos que le rodean, incluyendo a los que más le quieren. Película soberbia, las imágenes en blanco y negro de Goulding nos remiten a los autores de cine negro en serie B más categóricos en su dureza: Irving Lerner, Phil Karlson, Samuel Fuller. De hecho El callejón de las almas perdidas (1947) podría ser el cruce perfecto de dos pelíclas de Fritz Lang de 1944: El ministerio del miedo y La mujer del cuadro, ahí es nada.
El remake
Guillermo del Toro (Guadalajara (Jalisco), México, 1964) llega ahora con una nueva readaptación de la novela de Gresham apoyándose en un guión de su mujer, la crítica de cine y escritora Kim Morgan (cuyo único crédito cinematográfico conocido es de apoyo en guión a The Forbidden Room de Guy Maddin).
Con un presupuesto mucho más holgado y un reparto de estrellas de primer nivel -Bradley Cooper, Rooney Mara, Cate Blanchett, Ron Perlman, Willem Dafoe, Toni Collette, David Strathairn-, esta nueva Nighmare Alley luce de un envoltorio mucho más vistoso y fluctuante que el film de primigenio, pese a que en muchos momentos -vestuario, fotografía, decorados, movimientos de cámara- eso sea todo lo que acabe siendo la película, quedando los matices psicológicos y la espiral oscura de acontecimientos en un segundo plano. Demasiadas ramas para tan poco bosque.
DE QUÉ VA EL CALLEJÓN DE LAS ALMAS PERDIDAS
Finales de los años 30, Estados Unidos. Stanton Carlisle es un hombre que trata de forjarse un futuro prometedor. Su primer destino es acabar trabajando en un circo, donde conocerá a todo tipo de singulares personalidades. Este lugar recoge a diferentes talentos, de los que Stanton sabrá sacarles partido, como es el caso de Molly, una joven extraordinaria con la que se marchará a la ciudad para crear su propio espectáculo. Pero, no satisfecho con este triunfo, Stanton se aliará con una misteriosa mujer llamada Lillith para crear un peligroso entramado para alcanzar el mayor éxito posible.
EL DIRECTOR: GUILLERMO DEL TORO
Guillermo del Toro es un guionista, productor y director mexicano, con más de 31 años de carrera como cineasta a sus espaldas. Se estrena como director de un largometraje en 1993 con Cronos, de la que también es guionista. A pesar de tratarse de su primer trabajo consigue hacerse con muy buenas críticas. Se consolida como director algunos años más tarde, en 1997, con Mimic y posteriormente se atreve con otros títulos como El espinazo del diablo (2001), Blade 2 (2002), Hellboy (2004), o El laberinto del fauno. Asimismo, Del Toro también desarrolla una prolífica carrera como productor con filmes como El orfanato, Splice o Los ojos de Julia.