Aldo Bonnard (Jean-Pierre Darrousin) lleva una vida algo apocada. El sueldo que gana no le da para cubrir sus deudas y vive atemorizado por un más que posible despido. Un día, todas sus penas se disipan cuando recibe un premio en la lotería de diez millones de euros.
Aldo está decidido a compartir esta alegría con su esposa (Valeria Bruni Tedeschi), pero en ese instante descubre que esta tiene una aventura con su jefe. Así las cosas, el protagonista decide ocultar su fortuna y llevar una doble hasta que se formalice el divorcio. Después de todo lo que ha pasado, no está dispuesto a compartir su riqueza con alguien que lo engaña.
La Crítica de SensaCine
2,0
Pasable
Si yo fuera rico
Como ser rico sin que se note
por Rodolfo Sánchez
Si yo fuera rico supuso la primera película dirigida y escrita en 2002 por el tándem Gérard Bitton y Michel Munz, a la que siguió, inédita en España, Erreur de la banque en votre faveur, de 2009. En ambos casos, los directores toman el dinero como elemento alrededor del que hacer girar la narración. En Si yo fuera ricoSi yo fuera rico una película redonda ni convincente, pero sí medianamente interesante. El problema es que al final todo se les va de las manos a los directores, y caen en una ñoñería final casi insoportable, tirando por la borda todos los elementos interesantes que hacían de su propuesta algo irreverente. El intento queda como válido; la resolución, como lamentable. A favor: El arranque. En contra: Que se decante finalmente por el convencionalismo cuando al comienzo se presenta como algo diferente.