un soplo de aire fresco.
empecé la película sin ninguna expectativa, pero desde la primera toma hay un juego visual claro que capta la atención de inmediato. el humor característico de la trilogía original está presente desde el inicio —algo que se agradece— y líneas como “...si algo te está persiguiendo, corre” destacan por su ingenio.
la introducción está bien construida: los dinosaurios se incorporan de manera gradual, creando inmersión sin saturar demasiado pronto, como un “calentamiento” de lo que está por venir. también establece desde el principio una conexión directa con la trilogía.
el mayor problema es la premisa reciclada de reabrir el parque, un ciclo que ya conocemos. al menos, esta vez se reconoce con cierta ironía.
los personajes se presentan de manera clara; chris pratt aporta el carisma principal y hay suficiente química entre ellos. las actuaciones son sólidas, aunque no particularmente destacables.
la dirección es notable, enlazando escenas y diálogos con fluidez y adaptando el ritmo narrativo a momentos de tensión o calma. sin embargo, el problema de empezar con tanta fuerza es que cuando el ritmo disminuye en escenas posteriores, existe el riesgo de perder parte de la atención del público.
técnicamente, es un gran avance: dinosaurios más realistas y movimientos naturales que logran inmersión total. hay un subtexto interesante sobre el uso de la naturaleza como arma y el dilema de arriesgar la vida por el trabajo, aunque la película nunca abandona su carácter familiar, evitando la violencia explícita.
a pesar de ser predecible, la película mantiene el interés —especialmente en su primera media hora— y ofrece un final medido: coherente con la historia y sabiendo exactamente dónde detenerse. incluso hay espacio para jugar con personajes secundarios, como zara young (katie mcgrath), rompiendo brevemente la protección habitual de los protagonistas.
en general, es un soplo de aire fresco para la saga: visualmente espectacular, consciente de sus fallos y lo suficientemente entretenida como para sostenerse por sí sola. personalmente, puede que no supere a la primera —una obra casi insuperable, aunque no perfecta—, pero realmente disfruté esta aún más.