El pasado martes 1 de julio El Hormiguero puso punto final a su temporada 19 con la visita de Carmen Machi, quien desveló la señal que le hizo abandonar Aída. A pesar de la irrupción de La Revuelta en RTVE, que se lo puso difícil los primeros meses, el programa de Pablo Motos volvió a liderar el 'access prime time' un año más. Incluso sigue siendo lo más visto de dicha franja horaria con sus reposiciones ante las nuevas entregas del formato de David Broncano.
Con el buen sabor de boca que ha dejado la temporada más complicada de El Hormiguero, Motos ha hecho balance de lo que ha supuesto la batalla de audiencias con La Revuelta. Unas declaraciones en las que ha lanzado un dardo directo a aquellos colaboradores que ya no siguen en el exitoso programa de Atresmedia.
Atresmedia / RTVE
"Esta temporada ha sido brutal porque ha habido pelea. La competencia nos ha dado un extra para que la gente se una. Es un equipo que lleva 19 años unido. Aquellos que han sobrevivido, claro, porque los malos no han sobrevivido a los 19", afirma el presentador en el podcast Tengo un plan, quien vuelve a resaltar que esta batalla con La Revuelta "ha unido" mucho más a todo el equipo de El Hormiguero. De hecho, a pesar de que llevan casi dos décadas en emisión, Motos asegura que están en su mejor momento.
"Creo estamos más finos que nunca con el programa, estoy muy contento con cómo ha quedado. Estoy muy contento con la audiencia, con los patrocinadores, que nos exigen ser rentables, y , sobre todo, estoy muy contento con la calidad", destaca el conductor de El Hormiguero.
Motos reconoce que El Hormiguero de ahora no tiene nada que ver con el del principio. "Si ves los 'hormigueros' del primer año es muy raro que haya un programa donde no hay explosiones de algo, porque me parecía que cuando las cosas explotan, mola. Al principio todo era muy a lo bestia, que fuese un programa grande. Ahora quiero sea un programa que te apetezca ver, en el que te apetezca estar, y te vas a llevar algo que no sabías, interesante, y probablemente te vas a reir un par de veces", afirma en el citado podcast.
El verdadero cambio llegó cuando decidió fundar su propia compañía, 7 y Acción, junto a Jorge Salvador y quitar el control de Gestmusic. "Nos metimos en El Hormiguero, que es un nido de mucho dinero, y no había opción de fracasar. Cuando no tienes una segunda opción, no hay opción. Si fracasaba con El Hormiguero arruinaba a mi familia y a la siguiente generación, porque nos metimos en un crédito muy grande. Sufrí como un perro, tenía tics en la boca, cerraba un ojo, me salían granos de repente por los nervios y el miedo...", destaca.
"Era el peor presentador de la televisión seguramente, pero el nivel de esfuerzo que tenía era de 100, y mi socio se ríe ahora conmigo porque, por lo visto, un día le dije que íbamos a hacer historia y él, que había hecho Crónicas marcianas, que había estado con Arús y tal, se fue a Barcelona pensando que yo era gilipollas. Y aquí estamos", sentencia el presentador