No es el título que suele saltar rápidamente cuando se habla de los mejores 'thrillers', pero hace 9 años Dan Gilroy, el guionista estadounidense responsable de los libretos de títulos tan famosos como El legado de Bourne, Kong: La isla calavera o la serie Andor, debutó con el que sería su primera película como director y el resultado no pudo ser más redondo: Nightcrawler, un filme de suspense original y estremecedor en el que Jake Gyllenhaal brinda una de las mejores interpretaciones de su carrera.
La película fue estrenada en 2014 tras un largo proceso que comenzó con una idea que Dan Gilroy tuvo en 1988, exactamente 26 años de su debut, y la acogida por parte de público y crítica fue excepcional: grandes elogios para el guion de Gilroy, que además de brindar entretenimiento de la mano de una historia hipnótica e impredecible invitaba a una importante reflexión social, y unas interpretaciones dignas de aplauso tanto por Gyllenhaal, como por sus coprotagonistas René Russo, Riz Ahmed y Bill Paxton.
Con una puntuación prácticamente perfecta en Rotten Tomatoes, 95%, Nightcrawler es considerado un 'thriller' excelente por parte de los lectores de SensaCine, que le otorgan una puntuación de 4/5 estrellas y la destacan como "una película increíble" y "una de las mejores de la última década" sobre una "sociedad que es adicta a la violencia cotidiana".
"Estudio de un sociópata en negro, visión cargada de vitriolo del sueño americano y relato alucinado de unos Los Angeles de pesadilla, Nightcrawler puede que sea uno de los mejores debuts de un director norteamericano en estos últimos cinco años", escribía el crítico de cine Xavi Sánchez Pons en su crítica para SensaCine en la que también le otorgaba 4 estrellas.
En Nightcrawler, Jake Gyllehaal interpreta a Lou Bloom, un joven ladronzuelo que, tras descubrir que puede ganar dinero capturando imágenes de accidentes y escenas de crímenes y vendiéndoselas a medios de comunicación, decide probar él mismo. Sin embargo, a medida que comienza a meterse más y más en el competitivo mundo, se da cuenta que si quiere obtener capturas que garanticen la compra tiene que dar un paso más. Y recurriendo a métodos oscuros, extremos y despreciables consigue despuntar, llegando a formar su propia compañía con trabajadores que siguen sus turbias directrices para cumplir con el objetivo de obtener la mejor cobertura.
Aunque la película, que llegó a ser nominada a los Premios Oscar en la categoría de Mejor guion original, no se estrenó hasta 2014, cuando Dan Gilroy comenzó a jugar con el concepto que posteriormente se convertiría en Nightcrawler corría el año 1988. El guionista había quedado impactado por el trabajo del fotoperiodista Weegee y su libro Naked City, en el que había documentado la vida de la ciudad en la década de los 40 a través de las imágenes que obtenía como fotógrafo freelance nocturno, y eso le inspiró a crear un primer guion. Sin embargo, cuando en 1992 salió a la luz una película inspirada en el fotógrafo, El ojo público, Gilroy abandono la idea original.
Años más tarde, ya viviendo en Los Angeles, Gilroy se dio cuenta de que los periodistas/fotógrafos freelance dedicados a proveer de material a las agencias y cadenas de noticias eran una especie de equivalente moderno a lo que hacía Weegee y volvió a retomar el proyecto. El guionistas estuvo trabajando en Nightcrawler durante años, tomando diferentes decisiones que posteriormente serían clave en la originalidad de la película, como romper con el estereotipo de héroe apostando por un criminal como protagonista.
Una vez completo el guion, Gilroy tuvo claro que quería que Nightcrawler fuera su debut como director. Afortunadamente, su hermano Tony Gilroy estuvo allí para darle los mejores consejos y su primera opción para dar vida a Bloom, Jake Gyllehaal, le dijo que sí tras quedar impactado con la propuesta. El rodaje de la película comenzó finalmente en 2013, 25 años después de comenzar a gestarse lentamente, con un presupuesto de 8,5 millones. Recaudó 50 en su paso por salas y, aunque a menudo nos olvidamos de que existe, es uno de los mejores 'thrillers' recientes sin ningún género de duda.
