Ayer conocíamos la noticia de que la hija de Paul Walker, Meadow, había decidido presentar una demanda contra Porsche por la muerte de su padre. Según su abogado, "el Porsche Carrera GT es un coche peligroso. [...] No pertenece a las calles". La respuesta de la compañía no se ha hecho esperar y han sido tajantes: el actor murió por "conducción temeraria y exceso de velocidad".
El portavoz de Porsche, Calvin Kim, ha declarado lo siguiente: "No hemos visto la demanda, por lo tanto no puedo comentar cosas específicas. Como hemos dicho antes, nos entristece cada vez que alguien resulta herido en un vehículo Porsche, pero creemos que los informes de las autoridades en este caso establecen claramente que este trágico accidente fue resultado de una conducción temeraria y exceso de velocidad".
Cuanto tuvo lugar el accidente, los informes señalaron que el vehículo circulaba a una velocidad de entre 128 y 150 kilómetros por hora, más del doble de la velocidad permitida en la zona.
