Últimamente parece que todas las películas que se estrenan son una secuela, una nueva versión o un reinicio de otras historias que ya habían sido escritas. Sin embargo, Tom Hanks, que se encuentra en plena promoción de Sully, ha querido dejar claro que la gente sigue amando las historias originales por su capacidad de superar las expectativas del público.
Me gusta pensar que nos aproximamos a las películas de la misma manera que lo hace la audiencia. Solo buscamos ver algo que nos sorprenda, algo que no hayamos visto antes. Es curioso. ¿Quién pudo ver La La Land ayer? Cuando alguien ve algo completamente nuevo, algo que no se puede imaginar, piensas, "Bueno, gracias a Dios que han hecho esta película". Porque yo pienso que una película como La La Land es la antítesis de los grandes estudios. Primero, es un musical y nadie conoce las canciones... No es una película que se deje llevar por las tendencias. Pienso que va a ser una película que ponga a prueba a la audiencia nacional, porque no tiene ninguna de las cosas que buscan los grandes estudios. La La Land no es una secuela, nadie sabe nada sobre los personajes... Pero si la audiencia no abraza algo tan maravilloso como esta historia, entonces estamos todos condenados".
No deja de sorprender que sea uno de los hombres más populares de Hollywood el que haga unas declaraciones como las anteriores. Según informa Entertaiment Weekly, el protagonista de Sully, que se encuentra en el Festival de cine de Telluride, interrumpió una sesión de preguntas y respuestas sobre su próximo estreno para alabar la película de Damien Chazelle, La La Land. El actor no dudó en expresar que las historias originales tienen un efecto único en la audiencia, ya que, cuando no tenemos expectativas preconcebidas, es cuando una historia puede sorprendernos realmente.
Gilbert Films
Hanks tampoco dudó en señalar el lado oscuro de este fenómeno. El intérprete insistió en el hecho de que una película original como La La Land necesita tiempo para encontrar su público. Tras sus primeras proyecciones en los festivales de cine, la película protagonizada por Emma Stone y Ryan Gosling ha recibido excelentes valoraciones por parte de la crítica, así que, de momento, no deberíamos preocuparnos por la salud de las historias originales.
El que se pusiera en la piel de Forrest Gump en 1994 no ha sido la única voz crítica con la tendencia actual de la industria cinematográfica de Hollywood. El año pasado, el director de cine Brad Bird (Los increíbles, Tomorrowland: El mundo del mañana) criticaba la falta de originalidad de los estudios a la hora de crear nuevas películas y propuso la creación de un "sistema de asignación" que limitase el número de filmes sobre una misma franquicia que un estudio puede producir.
