Los atracadores ya están listos para un nuevo golpe. La casa de papel estrenará su tercera parte el próximo 19 de julio, y en sus nuevos episodios se enfrentarán a un asalto mucho más grande, si cabe, que el anterior. Ante la expectación de qué puede pasar con ellos y de cómo podría continuar una trama que ya parecía cerrada en su segunda temporada, SensaCine ha tenido la oportunidad de acudir al rodaje que se ha desarrollado en los estudios de 'Madrid Content City', en la Ciudad de la Tele de Tres Cantos (Madrid). Y, allí, hemos podido conocer multitud de nuevos detalles.
Gracias al director de arte de la producción, Abdón Alcañiz, y a los creadores y actores, hemos podido conocer las características que han traído aparejadas trabajar con Netflix. Esta "mudanza" a la plataforma, donde la ficción ha encontrado nueva casa, se nota ya en un primer momento con el despliegue de localizaciones y la magnitud de los decorados de los estudios en los que han trabajado. Y es que, sin ir más lejos, el 'hall' que veremos en la parte 3 de La casa de papel triplica en dimensiones al visto en la parte 1. A continuación, te contamos todo lo que debes saber:
MÁS DE 50 ESCENARIOS Y UNAS DURAS JORNADAS
Como habrás podido comprobar en el tráiler, a los integrantes de la banda se les han acabado las vacaciones. Cada uno había huido con su parte del botín a los lugares más remotos del planeta con el fin de no ser encontrados, lo que ha llevado al equipo a rodar en más de 50 decorados repartidos en lugares como Tailandia, Italia, Panamá...
Alcañiz nos pone el ejemplo de las islas Kuna Yala (Panamá). El equipo tuvo que visitar varias de ellas para encontrar la más deshabitada, acercándose así más a la trama. Después, necesitaron limpiarla, quitar cocos -"para que no matasen a nadie", explica-, construir una casita allí, llevar el material... Un duro trabajo para el que ya es hasta difícil el simple hecho de acceder a la localización, "te tiras más de una hora yendo en una lanchita hasta esa isla, pero ya llevas más de tres horas en un jeep cruzando la selva para llegar hasta lo que va a ser el coger la barquita. Imagínate eso llevando un colchón de matrimonio".
Netflix
LA FÁBRICA NACIONAL DE MONEDA Y TIMBRE SE QUEDA PEQUEÑA
La Fábrica Nacional de Moneda y Timbre estaba muy bien, pero ahora se queda pequeña. El CESIC, lugar que donde se rodó las dos anteriores partes de la serie, ha sido sustituido por otro escenario que, de hecho, han tenido que recrear ellos mismos en los platós de 'Madrid Content City'. Después de plantearse muchas instituciones que atracar, -Alcañiz nos cuenta que barajaron, incluso, cambiarse a algún otro lugar de Europa como Sofía (Bulgaria)-, finalmente se decantaron por continuar aquí.
El nuevo asalto se dará en el Banco de España, situado en la céntrica Calle Alcalá (Madrid). Sin embargo, para sus exteriores se ha utilizado la fachada del Ministerio de Fomento, en la Castellana (Madrid): "No podíamos ir a menos, el CESIC fue un sitio muy bonito para nosotros. Muy fácil de rodar allí porque era un sitio cerrado. Teníamos que ir a algo similar pero más grande", insiste Alcañiz. Pero el interior tampoco corresponde al verdadero edificio, ya que es una creación totalmente libre. Así como nos cuentan, a pesar de que la productora intentó visitar el interior del Banco de España para poder ser más o menos fiel a la realidad, la solicitud de permiso fue rechazada, por motivos de seguridad, especialmente sabiendo que se trata de una obra con tanto alcance como La casa de papel. Solo han podido ser fieles a la hora de reproducir cuatro bancos que tiene el 'hall' principal del edificio.
El estilo de Nuevos Ministerios era perfecto, según explica Alcañiz, por "ese sabor de solera, de una arquitectura franquista", continúa. "El granito nos iba a ayudar mucho al carácter del mensaje que lanzamos aquí en el proyecto, que es ese sabor dictatorial, de imposición, de atraco, de asalto…" Además, añade que, para seguir con ese estilo franquista, el equipo también fue al Valle de los Caídos (Madrid), y luego se recrearon esculturas y motivos dentro del edificio inspirados en lo que allí habían visto, con bronce y más granito.
EL COLOR, UNO DE LOS MAYORES RETOS EN 'LA CASA DE PAPEL'
No hace falta ser muy avispado para darse cuenta de que el rojo es uno más de los protagonistas en casi cada plano. Sin duda, es una de las características diferenciadoras de la serie. Alcañiz subraya que el rojo es el color primario primordial y que, a partir de ahí, el resto comienzan a ser colores terciarios que ayudan a "destacar al personaje principal y a que no se funda su piel con el entorno, además de darle ese dramatismo". Para gestionar todo esto, el equipo ha llevado a cabo varios métodos para probar los rojos: con diferentes tipos de telas, tests de cámara con composiciones de varios tonos pintados en madera para buscar fresas o granates, juegos con las escalas de luz…
Con todo este detalle, buscan alcanzar "la calidad de cine absoluta". De hecho, ya no valen los espacios planos y sencillos, si no que se trata de ir a por "la solera, el roce, el polvo, la textura…" para ayudar a ambientar. Eso se consigue mediante pequeños gestos como la ralladura de una columna o el no limpiar ciertos elementos.
Netflix
ASÍ SE HAN TOMADO LA VUELTA AL TRABAJO
Netflix nos sorprendió a todos cuando decidió revivir La casa de papel con una tercera parte. No solo a los espectadores a los que les cautivaron las dos primeras, sino también al conjunto de actores y a sus responsables. Debe de ser extraño volver a retomar un proyecto del que ya te habías despedido y, precisamente por eso, hemos preguntado a sus creadores qué sintieron cuando la plataforma de 'streaming' les hizo la propuesta.
El 'showrunner' Álex Pina nos ha asegurado que, para nada, fue una respuesta fácil: "tardamos más de dos meses en contesta a esa pregunta, que fue el tiempo que tardamos en abrir una vía narrativa que nos parecía sólida". Por su parte, Jesús Colmenar, director de la ficción, refuerza sus palabras: "lo que sí que teníamos muy claro es que no la íbamos a abrir si no teníamos por qué abrirla. Es decir, el hecho de que Vancouver [la productora] se hayan puesto manos a la obra con la producción es porque verdaderamente hemos encontrado una forma de contar algo mucho más allá de lo que contábamos en la primera temporada y más razones de peso dramáticas y narrativas para seguir adelante que, si no las hubiéramos tenido, no hubiésemos continuado".
Del mismo modo, Colmenar explica que lo que sintieron fue un torbellino de emociones, "por un lado, el éxito internacional de la serie, que a todos nos cogió por sorpresa, es abrumador. Pero a la vez te sientes muy agradecido. Porque al final, cuando tú trabajas, no lo haces para decenas de millones de espectadores, trabajas para un espectador que es el que tienes en la cabeza y que es el que quieres que viva, sienta o se divierta. En realidad, en tu cabeza solo tienes un espectador. Y luego se convierte en millones de espectadores y, de repente, todo parece que cambia. Te entra un respeto y un vértigo profundo ante en lo que se ha convertido tu serie".
Pero fue una mezcla de sentimientos porque, además, nosotros sabíamos que era una serie que terminaba. Era una serie cerrada. Y, de alguna manera, considerábamos que la habíamos terminado bien. De todas formas, claramente, los personajes daban muchísimo más de sí. Habíamos creado un mundo donde realmente podían suceder muchísimas más historias. Entonces, realmente, es una gran noticia que se reabra la serie y, además, de forma ya global.
La tercera parte de La casa de papel llega al catálogo de Netflix el próximo 19 de julio para alegrarnos, todavía más, las vacaciones. ¿Cuáles serán los planes de El Profesor (Álvaro Morte)?
