Sam, un joven que vive en París y al que le encanta la soledad, decide asistir a una casa donde se está celebrando una fiesta organizada por su ex novia Fanny. Tras vivir una de las noches más extrañas de su vida, despertará a la mañana siguiente solo en un cuarto de la casa donde los inquilinos han desaparecido.
Cuando decide asomarse por la ventana y ver en dónde se encuentra, descubre que la ciudad está repleta de muertos vivientes deambulando por las calles. Desubicado y absolutamente aterrorizado, Sam tendrá que buscar protección para poder sobrevivir ante el caos en el que se encuentra. ¿Pero, es el único superviviente?
Una película dirigida por Dominique Rocher, siendo este su primer largometraje. El filme está protagonizado por Anders Danielsen Lie (Personal Shopper), Golshifteh Farahani (A propósito de Elly) y Denis Lavant (Boris sin Béatrice).
Título original
La Nuit a dévoré le monde
Distribuidora La Aventura Audiovisual
Ver especificaciones técnicas
Año de producción2018
Tipo de películaLargometraje
Anécdotas 3 anécdotas
Presupuesto-
IdiomasFrancés, Noruego, Inglés
Formato de producción
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ColorColor
Formato audio-
Formato de proyección-
N° de Visado-
La Crítica de SensaCine
3,0
Entretenida
La noche devora el mundo
El inquilino discreto
por Carlos Losilla
Esta película, la ópera prima de Dominique Rocher, está dialogada por completo en inglés, por mucho que transcurra en París y se dé por supuesto que los personajes son franceses. Ello no supondría ningún inconveniente –es más, podría ser un bonito indicativo de su vocación abstracta-- si no se convirtiera poco a poco en algo más grave. Cuando el protagonista despierta en casa de su novia, tras haber intentado recoger sus cosas después de una ruptura, se encuentra rodeado por un ejército de zombis y la cámara, como hará también después en varias ocasiones, se pasea por los tejados hasta que vislumbramos la torre Eiffel. Estamos en París. ¿Estamos en París o eso quiere la película que creamos? Pues el modo en que Rocher filma los espacios, interiores y exteriores, la manera neutra y aséptica en que los mira, podría indicarnos también que estamos en Nueva York, o en Roma, o en Londres. No...