Meryl Streep ha sido la persona que ha recibido la Palma de Oro honorífica en la 77ª edición del Festival de Cannes. La actriz, con cuatro Oscar y 21 nominaciones a sus espaldas, ha subido al escenario con total humildad para recibir el reconocimiento. "Me acosté a las tres y tengo resaca", bromeaba en un encuentro en Cannes al que ha podido asistir AlloCine. A continuación, después de una introducción por parte del certamen, Streep ha recordado su carrera a lo largo de una hora de mano del periodista Didier Allouch.
"Soy tan mayor que he trabajado con todos los directores", comenta. La carrera de Streep es digna de enmarcar. Como bien dice, ha podido trabajar con figuras clave de Hollywood y al lado de algunos de los cineastas más valorados de la industria, como son Steven Spielberg, Mike Nichols, Michael Cimino, Clint Eastwood y, más recientemente, Greta Gerwig.
Ha hecho un breve repaso de todos ellos y una de las anécdotas que más ha destacado es la que ha compartido sobre Eastwood. Protagonizó Los puentes de Madison junto a él -quien era protagonista y director- en 1995, una cinta que se rodó en tiempo récord. "Rodamos la película en cinco semanas. Fue muy rápido. A veces estábamos ensayando y, sin avisarnos, nos decía: “Pasamos a la siguiente escena” y seguía con el ensayo en la toma final", desvela.
Nunca levantó la voz, excepto una vez, cuando alguien hablaba durante una toma. Gritó tan fuerte que todo el equipo quedó conmocionado durante el resto de la tarde
"Fue increíble trabajar con Clint. Nos levantábamos a las cinco de la mañana para rodar pronto, y así Clint podía ir a jugar al golf", recuerda la actriz con una sonrisa.
Precisamente Clint Eastwood es un director conocido por sus rodajes tranquilos y organizados. Jenna Fischer, que trabajó con él en 15.17 Tren a París (2018), explicó en una entrevista con SensaCine por qué todo el mundo quiere trabajar con él. "Ha estado trabajando con el mismo equipo desde siempre, se entienden a la perfección, así que el día se pasa más rápido, más eficaz, todo el mundo está muy relajado, nadie está estresado, los actores saben que solo se hacen 1 o 2 tomas de cada escena, así que todos los actores aparecen preparados para hacerlo, se saben las líneas. Todo el mundo sabe que, cuando haces una película de Clint Eastwood, llegas, haces tu trabajo y luego sales con la gente", declara la actriz.