A menudo Marvel ha sido alabada en su andadura por su increíble trabajo en la continuidad, permitiendo que los hechos vayan siendo consecuentes en su universo cinematográfico compartido. Da igual que hayan diferentes creativos en diferentes películas, tiene que haber un cuidado de los detalles para que no sean contradictorios. Aunque eso no quiere decir que tengan de vez en cuando algunos errores muy notables.
De algunos son hasta muy conscientes, pero los pasan por alto porque les permite llegar a momentos realmente asombrosos. Todo producto de su capacidad para improvisar, de no descartar ideas si son lo bastante buenas, sin importar de quién venga. “La mejor idea gana” es un lema tal y como se aprecia en el libro MCU - The Reign of Marvel Studios, y es algo que siguieron férreamente para hacer Vengadores: Endgame.
Kevin Feige y su equipo se han enorgullecido siempre de su capacidad de respuesta y también para rescatar detalles de algunas de sus primeras películas para que tengan una recompensa emocional eventualmente. En Endgame se aprecia su capacidad para todo esto, con los guionistas Christopher Markus y Stephen McFeely empezando a escribir el guion muchos años antes de empezar a rodar, teniendo que responder a varios de los cambios que se producían con las nuevas películas.
Mientras elaboraban borradores del guion en 2016, en Australia se estaba rodando Thor: Ragnarok, que iba a suponer un cambio importante para Chris Hemsworth en su interpretación del personaje, resaltando una faceta más divertida. Su versión previa del guion tenía a Thor en su versión más seria, pero el buen resultado de la película les llevó a cambiar el tono del personaje. Sin embargo, un detalle concreto ponía en riesgo el que iba a ser uno de los mejores momentos de Endgame.
Ser digno
En Ragnarok se destruye el Mjölnir, el famoso martillo de Thor que le permitía invocar rayos que lanzar contra sus enemigos y que volvía cuando era invocado. La película de Taika Waiti establece que el martillo nunca fue lo realmente importante, y permitió a Thor invocar rayos a voluntad aunque este fuese destruido. Esto chocaba con su plan de hacer que Capitán América terminase empuñando el Mjölnir para luchar contra Thanos, culminando así el pequeño momento en Vengadores: La era de Ultrón donde el martillo se mueve levemente cuando el capitán intenta levantarlo.
“No puedes encontrar nada que la iguale”: Una de las películas de ciencia ficción más criticadas fue clave para crear el éxito de MarvelTal y como se establece en dicha película, el martillo sólo puede ser empuñado por aquel que es digno de hacerlo, y que el Capitán América lo hiciese en el momento más crucial de la batalla convertía todo en un momento extraordinario. Un instante que los fans estaban esperando fervientemente, por lo que se incluyó igualmente a pesar de que Ragnarok había establecido que no era importante, suponiendo un error de continuidad. Tal y como defiende Christopher Markus: “Es demasiado alucinante para no hacerlo”.
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