El Festival de Sitges continúa y en la tercera jornada vemos Mantícora, una de las películas más esperadas del certamen. Sobre estas líneas puedes ver la crítica del publisher de SensaCine Alejandro G. Calvo sobre el nuevo filme de Carlos Vermut.
Tras Diamond Flash, Magical Girl y Quién te cantará, el realizador cuenta en Mantícora la historia de un joven pedófilo, quien es consciente de su condición de monstruo. El título retrata el día a día del protagonista tratando de atenuar su propia monstruosidad.
En comparación con Magical Girl, en la que Vermut introducía muchas ideas, "la primera sorpresa que te encuentras con Mantícora, es que ha reducido las ideas. Ha destilado conceptualmente la dramática de su película en una idea o dos muy potentes: la representación compleja, lúcida y directa de la monstruosidad que se puede hallar en el ser humano", cuenta G. Calvo.
Mantícora también es un "retrato de la soledad" y "de ese monstruo aterrador" que es el personaje interpretado por Nacho Sánchez, que trabaja como diseñador de videojuegos. "La dramática de la película no busca crear tensión sobre los posibles actos que pueda hacer. Es lo contrario. Es una película sobre el vaciado del propio protagonista, autolimitándose, alejándose cada vez más y entrando en una relación con una chica de aspecto aniñado". A esta última le da vida Zoe Stein.
"El terror nunca es externo, siempre es interno" en Mantícora. "El terror es mirar a los ojos del protagonista, no lo que el protagonista pueda llegar o no hacer", añade G. Calvo. Lo nuevo de Vermut es una "película desoladora. Busca retratar el horror sin hacer pornografía del horror, abordando un tema complejo y nefasto y terrorífico y lo hace con unas formas de acercarse almonstruo que pocas veces he visto en la historia del cine"
Mantícora "no es una película fácil", concluye G. Calvo, pero "es una pequeña joya".
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