Superagente 86 de película

Cuando se anunció que el simpático y torpón Steve Carell iba a encarnar al Superagente 86 en la versión cinematográfica de la serie televisiva, muchos aplaudieron la decisión. Pocos debían imaginar que el bueno de Carell, en auge después de su magnífica aportación al éxito del remake estadounidense de ‘The Office', no conseguiría que la película final no acabara como el bluff que a la postre resultó siendo. La culpa no es del actor ni de su partenaire, una sexy Anne Hathaway, sino de un guión sin chistes, sin gancho, y de una dirección que hace gala de la peor desgana posible. Sosa y fallida, ni tan siquiera el desfile de cameos (Terence Stamp, Bill Murray o Leonard Stern, uno de los productores de la serie, entre otros) consigue acaparar el interés y las risas del espectador. Misión fallida para el superagente más malogrado de la pantalla. En la pequeña y, más escandalosamente, en la gr