Une affaire de goût

Nicolas Rivière (Jean-Pierre Lorit, La balade de Lucie), un joven camarero, se hizo amigo de Frédéric Delamont (Bernard Giraudeau, L'empire du tigre), un acaudalado hombre de negocios de mediana edad. Este poderoso hombre se siente atraído por el encanto del joven Nicolas y sin pensárselo le ofrece un trabajo lucrativo en la degustación de alimentos. A pesar de las diferencias, una estrecha amistad empieza a surgir entre los dos hombres. Pero este vículo de confianza y admiración pronto desciende a un peligroso juego de engaño y obsesión.

El rico neurótico dirije al joven aventurero en un baile psicológicamente emocional que a la misma vez es fascinante y cruel. Lo manipula para hacer todo tipo de cosas sin ser consciente de ello pero no sabe qué está arriesgando por todo este lujo. Al principio Nicolas actúa por dinero hasta que es presa de las obsesiones de Frederic aunque signifique la ruptura de la relación con su novia Béatrice (Florence Thomassin, Le coeur des hommes 3).