Hace un año, José Antonio Avilés se despidió de los espectadores tras participar por última vez en Así es la vida. El polémico colaborador, que participó en Supervivientes 2020, puso punto y final a su carrera televisiva. "Todo tiene un principio y un final, y hoy me toca cerrar una etapa maravillosa", señaló el cordobés, quien había estado ya un tiempo alejado de los platós. Entonces, los espectadores apostaban por cuál sería su próximo destino y entre ellas no estaba su nueva vida.
Nadie esperaba que Avilés sí pusiera final a su carrera televisiva en Así es la vida, ya que gran parte de la audiencia le veía en Ni que fuéramo Shh. Sin embargo, el cordobés decidió volver a su ciudad natal y comenzar una nueva vida tranquilo alejado del foco mediático.
Avilés tuvo una carrera televisiva bastante agitada en la que las mentiras y polémicas estuvieron más que presentes. Se inventó que había estudiado Periodismo y el fallecimiento de su abuela, algo por lo que le señalaron en Telecinco. Sin embargo, tras una primera etapa muy controvertida, el cordobés volvió a la que considero "mi casa". "Seguirá siendo mi casa y cuando tenga que volver, pues volveré", afirmó en una entrevista a YoTele.
"Ha sido un aprendizaje continuo desde el inicio. He fallado, he fracasado, me he levantado, me he confundido, he pedido perdón. Sobre todo me quedo con eso último, aprender a pedir perdón", reconoció sobre su paso por Mediaset. Una época en la que sufrió un micro ictus, en 2022, que le obligó a frenar en seco y recolocar su vida.
A este problema de salud, se le sumó la enfermedad de Crohn y un diagnóstico de hígado graso que él mismo explicó con crudeza en televisión. "Cuando mi cuerpo llega a un peso, mi hígado no metaboliza de la misma forma que si metaboliza cuando tengo otro peso. Tengo el hígado graso y cuando rebaso los 90-91 kilos mi cuerpo empieza a engordar y engordar. Mi metabolismo se ralentiza y lo que a ti te engorda un bollito, a mí me engorda tres veces", confesó en el programa Viva la Vida, presentado por Emma García.
Esto llevó a que Avilés decidiera finalmente retirarse de la televisión y comenzar una nueva vida. En la actualidad, el colaborador regenta su propio negocio: La Heladería de la Judería, un local situado en el centro de Córdoba que ofrece también bebidas frías, café y zumos naturales. Y no solo es el dueño del negocio, sino que también se implica en todo lo relacionado con la heladería para que salga adelante.
Su vida es bastante discreta ya que, además de desaparecer del foco mediático, se ha tomado un descanso en sus redes sociales. De hecho, hace 5 días volvió a publicar algo en Instagram tras llevar un año sin rastro de él.