Hay películas que sencillamente están destinadas a cambiar el destino hasta de compañías enteras. Es el caso de una mágica película que surgió para Disney en el momento que más lo necesitaban, dando un giro a su rumbo y volver a convertirla en la máquina de clásicos animados que es en la mente de mucha gente. Todo comenzó con La sirenita.
Ahora su remake en acción real está asaltando las salas de cine de todo el mundo. Un remake que algunos como yo consideramos innecesario. Primero porque los remakes en acción real suelen estar muy por debajo de la fantasía de las películas animadas. Segundo porque es imposible igualar el impacto que tuvo esta película, que en mi caso está entre mis favoritas del estudio.
Ariel es la hija del rey Tritón, además de una intrépida y simpática sirenita. Cansada de sus obligaciones como princesa, su mayor deseo es abandonar el reino de los mares para tener una vida normal en la superficie. Una vida en la que no sea reconocida por todos. Gracias a un pacto con la malvada bruja Úrsula en el que la princesa le entregará su preciosa voz a cambio de tres días como una persona normal en la superficie, Ariel conoce al príncipe Eric, un humano encantador del que se enamora al instante.
Las mejores películas de Disney+ en 2023 según SensaCineSu padre, Tritón, no tardará mucho en enterarse de que su hija se ha enamorado de un humano, lo que provocará su enfado e intente convencer a Ariel de que dé marcha atrás y deje a un lado sus sentimientos. Con sus amigos Sebastián, el cangrejo gruñón, y Flounder, el adorable pececito, Ariel deberá luchar para salvar el reino de su padre de la malvada Úrsula.
Fue todo un fenómeno que llegó tras uno de los momentos más duros de Disney comercialmente hablando, marcando por completo la dirección del estudio a partir de varias de sus claves. La adaptación de un clásico cuento europeo, la recuperación del concepto de "Princesa Disney", tener a los mejores animadores creando secuencias completamente inolvidables y dando vida a estos personajes. Pero, sobre todo, la película se volvió un clásico gracias a su carácter musical, a canciones escritas por Howard Ashman que la volvieron completamente mágica, como 'Parte de él' (y eso que estuvo cerca de ser eliminada).
'La sirenita': la película que salvó a Disney
Todos esos detalles han sido en mayor o menor medida replicados por otros clásicos de los noventa, como La bella y la bestia o Aladdin. La sirenita presentó todo eso en su faceta más pura, todavía sin ser una fórmula, y contó con un inmenso trabajo por parte de los animadores para darle un aspecto visual inigualable. Se aprecia un increíble trabajo tanto en la vida bajo el mar (imaginad todas las horas de trabajo puestas sólo para dar ese movimiento al pelo de Ariel) como para desplegar los aspectos más fantásticos de la historia.
No me gustan los 'remakes' en acción real de Disney, pero esta fantástica película es la excepción que consigue emocionarmeLo más cerca que hemos podido ver en acción que se acerque a ese derroche visual acuático que se despliega en la animación está en Avatar: La forma del agua, y les llevó más de una década de trabajo y una gran cantidad de avances en tecnología para llegar a ello. Y lo que hemos podido ver de La sirenita en acción real no se acerca ni a eso, así que tengo mis dudas de que haga justicia a una película que prácticamente salvó al estudio.
Puedes ver La sirenita en Disney+.
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