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    Gwyneth Paltrow rechazó una de las películas más enormes y taquilleras de la historia y nosotros nos alegramos: con ella no hubiera sido lo mismo
    Alicia P. Ferreirós
    Amante de las series y gran aficionada al terror, la ciencia ficción, la crónica negra y el ‘true crime’.

    Ella, sin embargo, tiene razones para arrepentirse: la película que eligió en su lugar pasó sin pena ni gloria. Y va sin acritud, pero solo Kate Winslet puede ser Rose.

    20th Century Fox

    Es imposible saber -ni siquiera imaginar- cómo hubiera sido Titanic y si hubiera resultado ser el fenómeno que fue si Leonardo DiCaprio y Kate Winslet no hubieran sido los elegidos por James Cameron para meterse en la piel de Jack y Rose, pero lo cierto es que ahora nos parece algo impensable. Sin embargo, pudo haber sido así, ya que el famoso cineasta que ahora está en boca de todos por el estreno de su esperada Avatar 2 estuvo considerando seriamente a otros intérpretes para la pareja protagonista de la que sería una de sus películas más importantes.

    No es un secreto qué actores y actrices lucharon por hacerse con los papeles de Jack Dawson y Rose DeWitt Bukater. Tampoco qué otros pudieron haberles arrebatado a Winslet y DiCaprio los personajes con los que se consagraron como grandes estrellas de Hollywood. En el caso de Rose, una popular actriz de los 90 que conocemos realmente bien rechazó el papel sin dudar demasiado: Gwyneth Paltrow, que comenzaba a despuntar en la industria con cintas como Se7en, Dos vidas en un instante y Emma pero todavía no había arrasado con su inolvidable Shakespeare in love con la que ganó el Oscar. Antes de que eso sucediera, Paltrow había rechazado Titanic, que había resultado ser la película más taquillera de la historia.

    Titanic
    Titanic
    Fecha de estreno 9 de enero de 1998 | 3h 14min
    Dirigida por James Cameron
    Con Leonardo DiCaprio, Kate Winslet, Billy Zane
    Medios
    4,3
    Usuarios
    4,4
    Sensacine
    2,5
    Ver en Disney+

    Haciendo retrospectiva es fácil verlo, pero entonces Paltrow se decantó por la otra película que le proponían: Grandes esperanzas, una película romántica dirigida por Alfonso Cuarón que modernizaba el clásico de Charles Dickens y que pasó sin pena ni gloria en su estreno. Críticas mixtas y una discreta taquilla la dejaron muy muy lejos del megafenómeno cinematográfico y cultural que resultó ser la cinta de James Cameron, que 25 años más tarde ocupa el tercer puesto en la lista de películas más taquilleras de la historia.

    La historia de amor de Jack y Rose cautivó por completo a los espectadores en parte por la química increíble que derrochaban Winslet y DiCaprio, pero Titanic hizo historia por mucho más que eso, con unos efectos visuales fuera de serie que marcaron una época e hicieron historia en el cine. Pero para Gwyneth Paltrow, cuando se lo ofrecieron, era solo "una película con un barco".

    '¿Estas loco? 'Grandes Esperanzas' y 'Dos vidas en un instante' tenían grandes personajes y grandes historias. 'Titanic' tenía un barco'

    Paltrow lo asumía bromeando en una entrevista con The Morning Call en 1998, cuando le preguntaban si se arrepentía de su decisión de rechazar Los Vengadores y Titanic para hacer Dos vidas en un instante y Grandes esperanzas respectivamente. En aquel momento, Paltrow sintió que Grandes Esperanzas tenía lo que le faltaba a Titanic.

    "Mi madre me mataría si me oye hablar de rechazar papeles en películas. Dice que no es propio de una dama. Sé que la historia es que lo rechacé, pero creo que realmente estaba en disputa, que fui una de las dos últimas", explicaría tiempo después en entrevista con The Howard Stern. "Miro hacia atrás a las elecciones que he tomado y pienso: '¿Por qué diablos dije que sí a eso? ¿Y no a eso?'. Y al mirar el panorama general piensas: hay una lección universal aquí: "¿De qué sirve aferrarse a los papeles?", reflexionaba Paltrow.

    "Leo vino a la entrevista y pasó una cosa rara"

    Además de Paltrow, otra famosa actriz, Claire Danes, también dijo que no a Rose. En su caso, la razón tiene su lógica: la protagonista de Homeland venía de protagonizar Romeo + Julieta junto a DiCaprio y no quería asociarse demasiado a ningún compañero en pantalla. Mientras, Winslet, por su parte, estaba haciendo una fuerte campaña por el papel ante un Cameron que no estaba demasiado seguro a pesar de haber quedado impresionado por su prueba.

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    Por su parte, el papel de Jack estuvo cerca de ir a parar a Matthew McConaughey, que llegó a hacer una prueba con Winslet de la que recuerda haber salido convencido de hacerse con el papel. Pero nunca le llamaron porque, como contaría James Cameron más adelante, cuando DiCaprio hizo su prueba con Winslet, hizo que todo el mundo que estaba en la sala estuviese pendiente de ellos: "Matthew leyó el papel y luego conocimos a Leo. Vino a una entrevista y pasó una cosa rara", recordó Cameron en el programa de Jimmy Fallon. "Miré alrededor de la sala y todas las mujeres del edificio estaban allí… la contable estaba allí, la guardia de seguridad estaba allí, así que pensé que tal vez sería mejor elegir a este tipo".

    "Matthew fue completamente fantástico", recordaba Winslet, por su parte. "Pero hubiera sido una película totalmente diferente. Simplemente no habría sido todo Jack y Rose, Kate y Leo". Y no podemos estar más de acuerdo con ella.

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