Si creciste en los años 90, estamos seguros de que recuerdas Liberad a a Willy, una emblemática y conmovedora película dirigida por Simon Wincer y estrenada en 1994 que nos dejó un claro mensaje sobre los problemas éticos de mantener a los animales en cautiverio a través de la historia de amistad entre un niño huérfano y una orca de 10 toneladas que vive en un acuario.
Una película que dejó huella a toda una generación de la que formaron parte caras tan conocidas como la de Michael Madsen, Lori Petty o Michael Ironside, pero en la que sin duda los grandes protagonistas eran Jason James Richter, el expresivo niño actor que daba vida a Jesse, y Keiko, la enorme orca que en la película conocíamos como Willy.

Tras el éxito de la película se produjo un gran movimiento social con el objetivo de liberar a Keiko, que, tal y como ocurría con Willy en la trama de una película, había sido alejada de su hábitat y vivía cautiva en un acuario. Finalmente, la presión social y el dinero recaudado permitieron que Keiko pudiera ser liberada, aunque su final fue mucho más triste que el de Willy: tras 20 años en cautiverio, la orca nunca pudo acostumbrarse de nuevo a su hábitat y tendía a acercarse a la costa para relacionarse y jugar con los humanos. Murió en el año 2003.
Respecto a Jason James Richter, quien interpretó al joven y rebelde Jesse, 30 años después de la película actualmente tiene 44 años -casi 45- y Liberad a Willy sigue siendo la película más conocida de su carrera como intérprete.
De hecho, el éxito Liberad a Willy fue la primera experiencia en un rodaje de Richter, que guarda gratos recuerdos de la experiencia y, en particular, de su encuentro con la orca Keiko. Al menos, eso es lo que afirmó en 2013 en una entrevista con Daily Beast coincidiendo con el 20 aniversario de la película:
"Recuerdo que fue uno de esos momentos de fascinación pura y absoluta cuando era niño. No ves el peligro. A los 11 años, piensas: '¡Dios mío, una ballena! ¡Es increíble! ¡Esto será increíble!'. Si hubiera tenido 17 años, tal vez hubiera pensado: 'Oye, esta cosa me va a arrancar la mano de un mordisco', pero cuando tienes 11 años, piensas: 'Vaya, qué bien. Déjame tocarla'".
Seleccionado entre más de 4.000 niños para interpretar a Jesse en 1993, Jason James Richter repitió su papel en 1995 y 1998, en las dos secuelas de Liberad a Willy y durante la misma década se le pudo ver en otras películas, como La historia interminable III, secuela del famoso largometraje dirigido por Wolfgang Petersen en la que interpretó a Bastian, o El cliente.
Posteriormente, a finales de los años 90, el joven actor decidió abandonar los platós y tomarse un largo descanso para dedicarse a su otra pasión: la música. Richter se unió como guitarrista a varias bandas.
Más de una década después, en la década de 2010, Richter volvió a tener algunos papeles como actor. Primero pequeñas apariciones en series como Bones o Mentes criminales y luego también participando en algunos largometrajes, algo que ha seguido haciendo hasta la actualidad. De hecho, desde 2021 le hemos visto participar en proyectos de mayor escala, como Pequeños detalles, un oscuro thriller de John Lee Hancock con Denzel Washington, Rami Malek y Jared Leto.
También fue noticia en los periódicos cuando fue acusado de violencia doméstica en 2018 por su novia. Aunque negó los cargos, fue condenado a cuatro días de prisión y un período de prueba de 36 meses por vandalismo.