Hace algunos años, mientras Marvel Studios estaba en la cresta de la ola estrenando algunas de las películas más importantes y taquilleras del UCM, Sony Pictures decidía que no iba a conformarse con producir la nueva saga de Spider-Man protagonizada por Tom Holland. En su lugar, apostaría por la creación de un universo propio en torno al Hombre Araña, con películas basadas en villanos y otros personajes secundarios que le permitieran expandirse.
La estrategia, en términos generales, no le fue bastante bien, pero sí comenzó con buen pie. Pese a las dudas iniciales, la primera película de este universo de antihéroes de Sony Pictures, Venom, fue un éxito rotundo en taquilla, recaudando más de 856 millones de dólares en todo el mundo y despidiendo 2018 como la séptima película más taquillera del año.
Tras el éxito de la película protagonizada por Tom Hardy en la piel del simbionte alienígena, se produjeron dos secuelas: Venom: Habrá matanza, que sumó más de 506 millones, y Venom: El último baile, con 478 millones de dólares.
Hoy en abierto podemos ver la primera película de la saga del antihéroe: Venom será emitida este viernes 5 de diciembre a las 22 horas en Cuatro.
El punto de partida de Venom es el hallazgo por parte de una sonda de la compañía de bioingeniería Fundación Life de un cometa con formas de vida simbióticas de las que toma varias muestras que decide llevar a la Tierra. Mientras una de ellas se escapa, la compañía logra llevar las tres restantes a su laboratorio, donde se dan cuenta que los extraños organismos solo pueden sobrevivir mediante cuerpos que respiren oxígeno y les sirvan como huéspedes. Cuando el director de la fundación, el Dr. Carlton Drake (Riz Ahmed), comienza a utilizar los simbiontes para realizar experimentos con humanos, la información llega hasta el reportero Eddie Brock (Hardy) y, pese a las advertencias de su novia Anne (Michelle Williams), decide que va a llegar al fondo del asunto para desenmascarar a Drake.
Sin embargo, su visita al laboratorio acabará derivando en su contacto con un simbionte que se apodera de su cuerpo dando lugar a Venom, una criatura con poderes sobrehumanos.
La película dirigida por Ruben Fleischer fue la primera en apostar por el villano/antihéroe de los cómics de Spider-Man como personaje principal, aunque 10 años antes ya le habíamos visto como villano de la tercera película de la saga de Spider-Man de Sam Raimi protagonizada por Tobey Maguire. En ella, Venom era interpretado por Topher Grace y suponía una de las principales amenazas del protagonista, pero cómo se produjo la introducción del personaje fue muy criticada por los fans.
Tras Spider-Man 3 se cancelaron planes de una cuarta película y el 'spin-off' centrado en Venom, así que, cuando Sony Pictures anunció la película en solitario del personaje, había cierto excepticismo con el resultado.
"No es el fracaso que nos veíamos venir"
"Venom, más de diez años después y sin Spider-Man de por medio, dista de ser el estrepitoso fracaso que tantos nos veíamos venir", agradecía Alberto Corona en su crítica de 3 estrellas para SensaCine. "El hecho de que Spider-Man 3 se hubiera estrenado un año antes de la exitosísima El caballero oscuro, comúnmente considerada como el punto de ebullición para los superhéroes atormentados, podría haber introducido en la mente de los productores la idea de que era necesario un prisma similar para tratar el simbionte, pero el paso del tiempo parece no haber modificado para nada el modo de pensar de Avi Arad, productor tanto de la tercera película del trepamuros como de Venom.[...] La gente tras este proyecto ha preferido seguir pensando que hay que tomarse a coña al álter ego de Eddie Brock, y ha puesto en pie una pequeña rareza que parece haberse escapado de las carteleras del propio 2007".
"No obstante, es una película simpática. [...] La primera y visionaria película en entender que, al fin y al cabo, Venom es un tipo cachas venido del espacio que sólo piensa en comer, y tiene colmillos, y una lengua muy larga", concluía el crítico.
Además, al contrario que otras películas sobre antihéroes como Deadpool o Logan, Venom se estrenó con una calificación por edades para mayores de 13, lo que amplió su target a un público más amplio. "Lo bueno de Venom es que tiene la adaptabilidad y la completa composición para diversificarse hacia el público adulto o todo el mundo", explicaba al respecto el propio Tom Hardy en 2018. "No hay razón por la no pudiéramos darle la vuelta e ir a la parte más dura de Venom, eso podría pasar mañana, pero también tenemos que mostrárselo a un niño de 10 años. ¿Por qué apartar un personaje tan icónico de alguien que es un gran fan? ¿Solo porque quieres ver gente siendo ejecutada y comida viva?".
Con Venom -y sus secuelas- comienza y termina el éxito de la saga del universo de Marvel de Sony más allá de Spider-Man: Morbius fue denostada por público y crítica además de un fracaso en taquilla, solo superada en fracaso por Madame Web, cuya recepción fue aún peor. Tampoco le iría mejor a Kraven The Hunter, otro intento que acabó en batacazo en taquilla y terribles críticas.