Carlo Collodi se planteó escribir una historia titulada Pinocho. En un principio este cuento no iba a ser dirigido a un público infantil por lo que el final era bastante dramático: Pinocho es ahorcado por el Zorro y el Gato como castigo por su comportamiento. Finalmente, el editor del escritor le aconsejó que le diese un tono más infantil.