Si sabes disfrutar de un buen 'true crime' o de vez en cuando te gusta echarle un ojo a las cada vez más habituales series y películas documentales o ficciones basadas en crímenes reales es más que probable que tengas localizadísimas algunas de las más famosas de Netflix. Esto es The Keepers, Making a Murderer, Wild Wild Country y, por supuesto, la comentadísima e inesperada Tiger King. Son solo algunos ejemplos de la cada vez mayor oferta de títulos de un género que cada vez suma más adeptos y que esta semana, sin ir más lejos, están a punto de flipar con la historia del ginecólogo experto en tratamientos de fertilidad que embarazó a más de 50 mujeres con su propio esperma sin que ellas lo supieran. La mencionada película se llama Nuestro Padre y contará una historia tan increíble como cierta y que no es la primera vez que ocurre.
Tampoco será la primera vez que nos quedemos ojipláticos con una historia real capaz de superar a la ficción, un detalle que al final acaba siendo la clave de que algunas de estos títulos documentales se conviertan en todo un fenómeno en redes sociales. Aunque nos ha pasado con todas y cada una de las mencionadas en el anterior párrafo, Netflix es una auténtica mina. Sin embargo, hemos tenido la osadía de brindarle a una de ellas el dudoso "honor" de ser la historia más loca: Abducted in Plain Sight, un caso del que, a no ser que conozcas la película documental, probablemente no habías escuchado hablar y que versa sobre un crimen real ocurrido en los años 70. El secuestro de una menor de edad por parte de un amigo y vecino de la familia que llevó a cabo su fechoría a plena luz del día y sin esconderse.
Dirigida por Skye Borgman en 2017 Abducted in Plain Sight es un documental al que se llega casi por casualidad, pero que atrapa al espectador entre sus redes desde el primer momento. Eso por descontado.
Y es que, a medida que avanza, no deja lugar ni a a la previsión ni a cerrar la boca, puesto que cada uno de sus giros es capaz de superar al anterior.
¿DE QUÉ VA 'ABDUCTED IN PLAIN SIGHT'?
Una familia cae en la trampa de un vecino manipulador que secuestra a su hija adolescente... En dos ocasiones
Aunque la descripción que ofrece Netflix del documental es escueta, la historia protagonizada por la familia Broberg y su infame vecino y amigo Robert 'B' Berchtold es una auténtica locura, repleta de elementos sorprendentes y giros inesperados, y la mejor prueba de que, a veces, la realidad puede superar a la ficción.
Netflix
Con un formato clásico de documental y a través de las entrevistas de varios de los implicados así como diversos materiales archivados del caso, el documental nos traslada hasta principios de los años 70 para presentarnos a los Broberg, una familia de Pocatello (Idaho) cuyo vecino y mejor amigo Robert Berchtold se obsesionó desesperadamente con una de sus hijas, Jan Broberg, desde que era una niña pequeña. Tras ganarse la confianza de la niña, con la que desarrolló una relación muy estrecha, y también de sus padres, B, como se hacía llamar Berchtold, fue llegando más lejos en su objetivo de forma paulatina hasta que, en 1974, secuestró a Jan por primera vez.
Especificamos que por primera vez porque, efectivamente hubo una segunda, pero es que, entre medias, el agresor y pedófilo mantuvo relaciones sexuales tanto con el padre como con la madre de Jan, manipuló a la niña con historias de alienígenas e incluso llegó a casarse con ella en México fruto de su engaño.
Lo que Berchtold fue capaz de hacer con los Broberg resulta tan impensable que es imposible dejar de fruncir el ceño a medida que avanza la historia. Mientras abusaba de la niña, a quien había convencido de que estar con él formaba parte de una estrategia alienígena para salvar el mundo, los padres de la pequeña estaban más preocupados por salvar su propio honor y que nadie supiese de sus vidas íntimas que de proteger a su propia hija. B lo sabía y lo utilizó para llevar a cabo sus detestables acciones a plena luz del día, sin ni siquiera tener que esconderse.
¿QUÉ PASÓ CON BERCHTOLD, JAN Y EL RESTO DE IMPLICADOS EN LA HISTORIA?
El relato tanto de Jan, quien estima que Bertchtold pudo abusar de ella aproximadamente en 200 ocasiones, como de sus padres, es realmente emotivo y desgarrador. Está muy marcado por un sentimiento de culpa, pero el espectador no puede evitar no parar de preguntarse cómo una historia así pudo llegar a producirse.
La respuesta tiene que ver con la época y con el lugar en que se produjo, una pequeña localidad en la que todos se conocían y en la que la importancia del qué dirán estaba por encima de todo.
Tras el desenlace de su peor pesadilla, Jan y su madre, Mary Anne han dado numerosas charlas y participado en numerosos eventos con el objetivo de crear conciencia sobre el abuso sexual y todo lo que lo rodea, así como el comportamiento o formas de manipulación que puede llevar a cabo un agresor de este tipo. Además, Mary Anne publicó un libro relatando el caso de Jan y su familia en 2003: Stolen Innocence: The Jan Broberg Story.
Tras su historia, Jan asegura que seis mujeres se han puesto en contacto con ella para asegurar que Berchtold abusó de ellas sexualmente cuando eran niñas.
Tras el segundo secuestro de Jan, Berchtold fue internado en un hospital psiquiátrico durnate seis meses y sólo fue condenado a un mes de cárcel. Además, interrumpió actos en los que participaban Jan y Mary Anne e hizo declaraciones a la prensa para desacreditar su historia. También llegó a enfrentarse cara a cara con Jan en un juicio en el que ella terminó consiguiendo una orden de alejamiento. Tras ser detenido por saltarse la orden en otro enfrentamiento, Berchtold fue declarado culpable de posesión de arma de fuego y asalto a mano armada, pero su propio hermano confirma en el documental que se suicidó antes de la sentencia.
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