Una de las mejores miniseries de terror de este siglo está en Disney+ y es perfecta para una maratón de Halloween

Dado que ya estamos en la semana de Halloween, que mejor que aprovechar para hacer una buena maratón de terror como ya es tradición. Aunque no es mala idea encadenar una serie de películas clásicas para una noche de miedo, no hay que desdeñar la posibilidad de coger una serie corta que cumpla bien esa función.

Y probablemente hay pocas series más efectivas para una maratón de este tipo que American Horror Story, la antología del terror de Ryan Murphy que ha ido cosechando múltiples éxitos y que se puede ver a través de Disney+. Con cada temporada funcionando como su propia miniserie, no es mala idea tirar directamente por la segunda, American Horror Story: Asylum, la más redonda de todas las estrenadas.

Briarcliff, un antiguo hospital para tuberculosos, se convierte en un manicomio gestionado por la iglesia católica. Corre el año 1964 y el manicomio alberga a algunos individuos gravemente perturbados. La administradora diaria es la hermana Jude Martin, que trabaja bajo la supervisión general del director, monseñor Timothy Howard. Sin embargo, su principal némesis es su médico interno, el Dr. Arthur Arden, que atiende con frecuencia a pacientes por la noche, pacientes que mueren y de los que se deshacen inmediatamente.

El último paciente de Briarcliff es Kit Walker, alias Cara Sangrienta, un acusado de asesinar en serie a varias jóvenes, pero que no puede ser juzgado por demencia. La periodista Lana Winters cuando empieza a husmear por el lugar para tratar de exponer todas las prácticas cuestionables de esta institución, pero la hermana Jude hará todo por pararle los pies.

Después del éxito obtenido con la primera entrega de American Horror Story, Murphy renovó con la intención de contar otra historia diferente con personajes completamente distintos. Iba a mantener, eso sí, a muchos de sus actores favoritos para que interpreten nuevos papeles, incluyendo a Jessica Lange, Sarah Paulson o Evan Peters.

'American Horror Story: Asylum': una casa de locos

Esto da una familiaridad a la serie, aunque esta vaya estirando su tono o transformándose radicalmente. Asylum cambia el terreno de las casas encantadas por los true crimes de psicópatas y los mad doctors, tanteando los límites de un horror psicológico que puede bordear ocasionalmente lo camp.

Su falta de miedo al ridículo permite arriesgar con el tono y los límites a explorar en la historia, y hacen de Asylum una experiencia bastante intensa y sensacional. Ninguna temporada posterior llegó a tener la misma magia tenebrosa que esta entrega, que puede entrar perfectamente en la conversación de mejores miniseries de terror de este siglo.

Puedes ver American Horror Story: Asylum en Disney+.

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