El justiciero de la noche

Paul Kersey (Charles Bronson) vuelve a Nueva York para ver a su amigo Charley (Francis Drake), pero justo al llegar le ve morir, ya que había sido salvajemente golpeado por miembros de una pandilla, que se considera 'dueña' de aquel territorio. Esto hizo que los vecinos llamaran a la policía, y Kersey, con su 'suerte' habitual, es encerrado como sospechoso, debido a que los policías lo encontraron al lado de la víctima.

Kersey solo continúa detenido porque el jefe de policía, Richard S. Shriker (Ed Lauter), conoce su pasado de justiciero, y quiere utilizarlo para limpiar la zona a cambio de su libertad. Hace un trato con Kersey, diciéndole que le mantendrá en libertad a cambio de que le informe sobre las muertes que sucedan. Sin ninguna otra opción, Kersey acepta el acuerdo y se va a vivir al apartamento de Charley, que está situado en un edificio en mal estado en medio de una zona de guerra. El edificio es habitado por inquilinos ancianos, que están aterrorizados por la guerra de pandillas.

Kersey declara su propia guerra personal contra la pandilla del barrio, que está liderada por Fraker (Gavan O'Herlihy), un psicópata que siente que la presencia de Kersey puede ser una amenaza para su liderazgo. A partir de entonces, Fraker decide asustar a todos, aunque su principal objetivo es matar a Kersey.