Opiniones Cowboy Bebop (2021)

Cowboy Bebop fue una de las más grandes obras animada de Japón en su momento y era evidente que una versión en acción viva iba a tener que realizarse. Finalmente, cuando llego el momento, fue algo temporal que vino y se fue en un abrir y cerrar de ojos. Esta serie de Netflix fue una propuesta que trato de ofrecer algo más fresco, pero aferrándose a la versión animada. Narra los eventos de la serie animada de una manera distinta y con otro enfoque, tomando incluso elementos de la película estrenada en 2001. Algunas cosas son como en la versión animada, pero con un tono algo diferente sin desviarse mucho del contexto original. Mantiene esa mezcla de policial neo-noir, aire de western y ciencia ficción y se agregan algunos momentos que se sienten como un policial clásico, elementos algo retro y hasta bastante humor. Mientras los efectos digitales se encargan de mantener los momentos de ciencia ficción visibles, el resto de la producción se orientó bastante en ofrecer escenarios con esa esencia de policial clásico y neo-noir. La banda sonora es como la de la versión animada, ofreciendo esa música jazz que la caracteriza. La apertura es una espectacular recreación de la apertura original manteniendo el mismo estilo gráfico y fue acertado que usaran la canción original de la serie animada. Respetaron el vestuario de los personajes y aunque el elenco quizás no pueda parecerse tanto a sus contrapartes animadas (sobre todo Jet Black), hacen un buen trabajo. Dieron más detalles sobre el pasado de estos personajes para poder conocerlos mejor. Ya desde el principio se empieza a explorar poco a poco el pasado de Spike, lo cual le da bastante desarrollo. A pesar de tomarse libertades creativas y de que el humor pueda llegar a sentirse muy fuera de lugar en algunas escenas, esta versión de Cowboy Bebop es una buena serie y una de las pocas adaptaciones decentes que Estados Unidos pudo haber hecho de una animación japonesa. La serie realmente mostraba potencial y tenía mucho más que ofrecer. Al principio no parecía mucho, pero mejora bastante a medida que los episodios avanzan. La historia es muy breve, pero hay más que explorar después de su conclusión. Cancelar esta serie después de su estreno fue algo injusto y debió tener una segunda temporada para al menos cerrar el arco argumental de los personajes. Cowboy Bebop de Netflix es una buena serie que pudo haber ido mucho más lejos y debió haber continuado. Mi calificación final para esta serie es un 9/10.

Serie USA del 2021, de diez capitulos, de una media de 55 minutos, con una valoración de 4/10, bajo dirección de Andrés Nemec y guión adaptado de Jeff Pinkner.

Esta adaptación del anime se le nota de entrada está condenada a encontrar críticas negativas, o por lo menos a peros desde su principio.

A pesar de esforzarse en ser redonda con un cierto estilo propio, en una animación impecable, con unos diseños vibrantes y una banda sonora a la que pocos pegas se les puede poner. Con una buena réplica de escenarios, ante personajes con cierta precisión puntillosa muy interesante.
En todo lo que respecta a naves y decorados, y también en la propia planificación de la imagen: planos, montajes, y uso de la música se clonan con fortuna aquella especie de regurgitación de un spaghetti western con la cara lavada, que era la serie anime.

Pero a pesar de esas cualidades algo no termina de encajar. Hay algo en el ritmo de la acción, planificada de esa manera hipercinética que solo la animación es capaz de brindar, y aquí no se recoge. Hay algo en ese drama culebronero, que con actores reales, queda impostado donde en el anime era emotivo. Pese al esfuerzo, esta nueva versión se le ve que queda a rebufo de su modelo primario, cuando por instinto se compara.

Por muy cuidada que sea su adaptación, el metraje no puede competir con eso, y es una pena. Porque a muchos niveles, la adaptación funciona: el inaprehensible elemento cool de la serie original es replicado con fortuna. La química entre los tres cazarrecompensas está ahí, y hay soluciones visuales ingeniosísimas, mitad retorcimiento par´ódico de las convenciones de la ciencia-ficción, mitad cine de acción de Hong Kong bien entendido (estupendo trabajo del coreógrafo Allan Poppleton),que funciona muy bien.