
El Hormiguero y La Revuelta están sufriendo las consecuencias del éxito viral de La isla de las tentaciones 8. Por primera vez, este lunes 17 de febrero el 'reality' de Telecinco superó a los dos programas en el 'access prime time'. Mientras el formato presentado por Sandra Barneda anotó un 13,7% de cuota de pantalla, el de Pablo Motos firmó un 13% y David Broncano se conformó con un 11,6%. Pero es que ni ambos espacios televisivos escapan de hablar sobre el fenómeno viral de lo que llevamos de 2025.
Las reacciones de Montoya al descubrir la infidelidad de su pareja Anita han traspasado fronteras. Hasta Whoopi Goldberg ha comentado el momento viral en la mesa de debate de The View, el programa en el que colabora en la ABC estadounidense. David Broncano y compañía también han hablado sobre ello y han señalado su irrupción en la "batalla" de audiencias con El Hormiguero, pero el formato de Motos no había hecho alusión hasta ayer.
Este martes 18 de febrero El Hormiguero recibió la visita de Leo Harlem, quien acudió al formato para promocionar el espectáculo teatral Mentes peligrosas y recordar algunos de las películas que pronto se estrenarán. Nada más comenzar, Motos destacó que el cómico le habían "hecho guardián de los nabos en Asturias" por lo que quiso saber que ventajas tenía. "Hasta yo mismo me lo pregunto", respondió el invitado.
Después de ver las imágenes del evento, en las que Harlem tenía "pinta de catedrático" al lucir la montera picona típica de Asturias, el equipo del programa llevó hasta la mesa la medalla que le entregó la cofradía de amigo de los nabos. Mientras, el presentador se probó la mencionada montera picona. "Te da un rollo pirata importante", señaló el invitado de El Hormiguero.
El presentador dio paso a unas imágenes para ver "el momento en el que besas el nabo". Unas palabras que provocaron la risa de los espectadores, pero que Motos puntualizo: "Esta frase solo la puedes escuchar aquí y en La Isla de las Tentaciones", afirmó el valenciano, provocando aún más las carcajadas de los presentes. "¡Montoya! ¡Montoya!", exclamó Harlem.
"Qué vida le queda a Montoya. Cuando salga y vuelva a su pueblo, le queda el resto de la vida siendo Montoya", reflexionó el presentador, quien inmediatamente volvió "al nabo".